Profesor Kim (KookTae) +18

Capítulo 4

Sábado de castigo.

Jungkook era precioso.

Todo en él lo era, su manera de hablar, la manera en la que sonreía y en la que se sonrojaba hasta volverse un tomate.

Y el profesor Taehyung no lo entendía porque él a su edad era lejos de ser una figura deseada. Era el típico adolecente que comía frituras y miraba de reojo a sus compañeros cuando se desvestian en las duchas, al que hacían bullying por su sexualidad y al que ningún chico jamás le prestó atención.

Entonces, ¿por qué Jeon ahora decía desearlo? ¿A caso el niño tenía un especie de síndrome?¿Un gusto raro por los hombres mayores?

Él no lo sabía.

Jungkook supiró y llevo el bolígrafo a su boca, mordiendo la punta. Un gesto que a Kim le pareció bastante indecente. Se preguntaba si Jungkook había hecho otra cosa más indecentes con su boca.

Taehyung bebió de su taza de café sentado en el escritorio en un intento de borrar esos pensamientos sobre su alumno, pero no podía evitarlo.

Y cada vez estaba más seguro de que si Jungkook fuera diez años mayor y el mismo no trabajara allí, hubiera permitido que lo folle en los baños a la primera insinuación.

Porque el chico estaba bueno aunque le duela admitirlo.

_Terminé _Jeon puso el papel con los ejercicios que Kim le había dado a resolver sobre el escritorio.

Taehyung se sorprendió al ser interrumpido en medio de sus más profundos pensamientos y aún algo desorientado, lo revisó.

Mientras esperaba por su profesor, Jungkook mantenía sus manos en sus bolsillos y la mirada alrededor del salón vacío. Eran los únicos en ese lugar y seguramente los únicos que estaban en el instituto un sábado a la mañana, todo por culpa de la rebeldía del estudiante.

Jungkook observó a Kim. Ese día había optado por usar un chaleco mostaza sobre una camisa celeste y un par de pantalones más grandes de lo normal. Sin olvidarse de sus queridas gafas que acomodaba como si fuera un hábito sobre el punto de su nariz.

_Jeon, estos resultados están mal.

_Usted dijo que los resuelva, nunca dijo que debían estar bien _El estudiante se encogió de hombros.

Kim retuvo las ganas de echarlo del lugar. Era un insulto a su trabajo.

_Jeon, no puedes continuar así _Señaló el profesor_ .Tú piensas que todo en la vida es fácil, pero en unos meses cuando cumplas dieciocho, espero que llegues a entender lo importante de la responsabilidad y madurez.

_Ya tengo dieciocho.

_¿Qué?

_Que ya soy mayor de edad _Jungkook corrigió no muy interesado, sin saber, que Kim sintió un millón de aves volar.

Jungkook, su Jungkook ya era un adulto.

_Creo que es todo por hoy _Taehyung se sintió cohibido de repente_ .Puedes retirarte.

¿Por qué? ¿Por qué se sintió aliviado de que Jungkook sea legal?

Si a él no le gustaba de esa forma.

Carajo, era algo inadmisible querer coger con su estudiante de secundaria.

_Profesor Kim _Jungkook llamó la atención de Taehyung y mordió su labio inferior con inquietud.

_¿Sucede algo, Jeon?

_Sí, es decir... _Se rascó la nuca_ . Siento lo de ayer, yo sólo no sabía que hacía y sólo l-losiento.

Esa noche el profesor había soñado con los labios de Jungkook, pero el beso había resultado tan corto que no tuvo tiempo de depositarse en su memoria, de disfrutarlo y permitirse recordar el sabor de los labios ajenos.

_Entiendo, sólo espero que no lo repita _Le advirtió el mayor y se levantó de su silla_ .A partir de ahora te enfocarás en mejorar tus notas y no en jueguitos estúpidos.

Taehyung se sentía menos culpable al hacerse creer que Jungkook no era homosexual y sólo jugaba con él, además era mucho más fácil rechazarlo de esa forma.

_No es un juego, yo si lo deseo _Jungkook le juró cansado de tener que repetir siempre lo mismo y encima tuvo que aguantar la carcajada que soltó Kim.

Genial, la primera vez que lo oía reír era para burlarse de él.

_Jeon, tú no tienes idea de lo que quieres _Meneó su cabeza_ .Te miro y únicamente veo a un adolescente promiscuo que es arrastrado por sus hormonas y con el sentido común completamente nublado.

_Yo sé lo quiero _Jungkook alineó su cejas con el enojo latiendo dentro suyo_ .Lo quiero a usted, quiero follarlo aunque le parezca algo indebido y me importa una mierda que no me crea.

Kim asintió fingiendo atención excesiva hacía el menor y se acercó con pasos lentos hacía Jungkook, quedando frente a frente.

Taehyung se lo tomaba todo como una broma, no tenía idea de que está vez jugaba con fuego.

La estatura de ambos era similar, tal vez un centímetro más o uno menos, pero la diferencia estaba en sus cuerpos. Jungkook conservaba una musculatura firme y grande debido a las horas de entrenamiento físico, mientras que el cuerpo de Taehyung podía describirse cómo delgado a excepción del trasero que su estudiante tanto amaba.

_Jungkook, quiero que te mires _Taehyung recorrió a su estudiante con la mirada.

Jungkook hizo lo mismo. Ese día había decidido traer el uniforme de gimnasia: un par de shorts que hacían lucir sus muslos y una camiseta que le quedaba enorme y aún así permitía que el profesor viera a través de ella su fuerte pecho.

Taehyung siguió y llegó al rostro de su estudiante. Fue una mala idea porque los labios de Jeon eran su perdición, lo rosas y apetecible que se veían, el piricing en su labio que era un decorativo y lo llamaba a caer en la tentación.

_¿No lo ves?_Kim levantó una ceja_ .Podrías tener a la chica que quieras a tus pies.

Jungkook agachó su cabeza y jugo con sus pies.

_Ahora quiero que me mires a mí _Taehyung indicó su pecho con sus manos.

Jungkook lo vió de arriba abajo, nunca se cansaría de mirarlo y hasta a veces deseaba llevarlo a su casa para tener la posibilidad de mirarlo más.

Taehyung también se miró: su horrible cuerpo que no tenía nada de especial y su rostro que aunque no podía ver, tenía idea de que estaba plagado de defectos.

No era atractivo de ninguna manera, punto.

_Tú no deseas esto, estás desorientado y yo no pienso aprovecharme de la confusión de un adolescente que... _Declaró Kim, pero antes de que diga otra cosa Jeon se aproximó a su cuerpo sin quitarle sus ojos de encima.

Taehyung no entendía su comportamiento hasta que la mano de Jeon tomó la cintura de Kim y unió su boca con la suya en un beso desesperado.

Un beso que esta vez Taehyung no podría interrumpir.