Hannigram Week 2023

"El Wendigo"

Parte 2

Día 7 : Almas Gemelas

La primera vez que Hannibal comió carne humana un cambio interesante pasó en su cuerpo...

Su piel se volvió completamente negra, sus extremidades se alargaron grotescamente, haciéndolo ver huesudo y con las uñas de las manos como si fueran navajas, sus pies se volvieron pezuñas, sus ojos completamente blancos y unas astas crecieron dolorosamente de su cabeza, ese día el joven Hannibal se convirtió en un Wendigo y su vida quedaría enlazada a la de la bestia eternamente

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Hannibal Lecter XIII había vivido los últimos 300 años de un país a otro, esto para evitar que la gente notará su inmortalidad y que el rastro de muertos a su alrededor no llamara la atención, usualmente Hannibal poseía el control de sus transformaciones, lo hacía de forma parcial para usar garras, colmillos, para que su nariz captará  olores o que su piel blindada lo protegiera de alguna arma, le había tomado más de cien años adquirir el control, pero aun así había veces que la parte salvaje de su ser lo dominaba y el Wendigo salía a tomar el mando, cuando eso pasaba la conciencia racional de Hannibal se quedaba de fondo en el subconsciente, veía lo mismo que el Wendigo pero no podía usar su cuerpo o intervenir en sus acciones, así fue como una de esas noches cuando el Wendigo se libero y asesino al senador Phillips de Baltimore, llevándose el cuerpo hasta los bosques de Wolf Trap, Virginia, para devorarlo a gusto y a sus anchas, de estar Hannibal bajo control, no se hubiera comido al senador Phillips, había sido un hombre muy educado en todo momento, o mínimo Hannibal no se lo comería así crudo entre el lodo del bosque, lo hubiera cocinado al horno y acompañado con un vino blanco, pero bueno, no había sido su momento...

Entonces un ruido llamo su atención, eran ramitas rompiéndose, Hannibal/Wendigo volteo y la luz de una linterna dio en su cara, había un hombre ahí,  tenía los rizos de chocolate más suaves que Hannibal había visto en su vida y unos ojos increíblemente azules, el hombre cayó sentado en el suelo mientras observaba atónito al Wendigo, entonces sus miradas se cruzaron, pero no sólo los ojos del Wendigo, ese hombre pudo ver más allá, encontró la mirada de Hannibal incluso tras los ojos blancos del Wendigo

- ¿puedes verme? -

Pregunto Hannibal, su voz era ronca y bestial, el hombre cayó desmayado antes de responder, aunque era claro que lo había entendido, increíble,  Hannibal nunca había logrado hablar en su versión Wendigo, pero ahora lo había logrado, lleno de curiosidad se acercó al hombre y comenzó a olfatearlo, pero había mucho pelo de otras bestias (perros, en su mayoría) lodo, desodorante y otras sustancias que no dejaban a Hannibal/Wendigo disfrutar del olor natural del hombre, con sus uñas se encargo de romper la ropa y zapatos del hombre hasta dejarlo desnudo, volvió a olerlo y está vez fue la experiencia más satisfactoria que Hannibal/Wendigo había tenido en toda su vida, el olor era salvaje y profundo como los bosques, también fresco como el río y lo mejor, olía a sangre también

mi pareja, mi elegido, mi alma gemela

Los Wendigo por lo general eran criaturas solitarias, cazaban solos, pero existían también los que encontraban una "alma gemela", entonces se volvían pareja y cazaban juntos, no todos los Wendigo tenían la suerte de poseer una pareja, así que Hannibal era afortunado, su bestia interior, feliz por conseguir pareja, dejó que Hannibal asumiera el control del cuerpo para que usará su inteligencia y atrapará a su potencial pareja, Hannibal así lo hizo, dejó a su hombre bañado de la sangre de su víctima y creo pruebas para incriminar a Will de asesinato

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El nombre de su alma gemela era William Graham, ex policía, retirado de 3 años atrás de la fuerza, según su informe médico se retiro por encefalitis y también exceso de trabajo que daño su salud mental, esto intereso más a Hannibal quien leyó sobre su expediente laboral y encontró que el agente Graham tenía una particular "suerte" para involucrarse en asesinatos brutales o volverse blanco de obsesión de asesinos seriales