"El Wendigo"

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Parte 1

Día 4: AU Sobrenatural

Will Graham era un hermitaño, vivía solo con sus siete perros en medio de los bosques de Virginia, pescaba, cazaba en ocasiones y llevaba una vida muy amena y tranquila, justo como siempre había soñado...

Will en su pasado había sido policía, y aunque muchos pensarían que se limitaba a patrullar calles, comer donas y encerrar ebrios locales, la verdad era que Will tenía una peculiar suerte para atraer la violencia, asesinos seriales o encontrar sangrientas escenas del crimen, en ese tiempo Will padeció insomnio, terrores nocturnos y un desorden mental que provocó una severa encefalitis, afortunadamente se trató a tiempo y pudo sanar, pero eso influyó mucho en que Will se retirara de la policia, a vivir lejos (de la enferma sociedad) y se aislara con sus perros lejos de todos, durante tres años Will disfruto de una paz muy cómoda, sin embargo eso termino cuando una noche de otoño sus perros empezaron a ladrar como locos por toda la casa

- ¡Winston, Buster! Calmense por favor, Zoe, deja de arañar la puerta -

Will no entendía lo que pasaba, pero sabía que los perros no podían estar tan nerviosos por nada, sospechando que se tratara de un intruso, Will tomó la escopeta que guardaba tras la puerta, se puso botas, gorro y chamarra para salir a revisar los exteriores, los perros lo acompañaron poniéndose a su alrededor, como protegiéndolo

-vamos chicos, saquemos a quien sea que se haya metido en nuestros terrenos -

Will y sus perros caminaron varios metros hacia adentro del bosque, pensaba llegar minimo hasta el río, sin embargo, apenas escucho el agua correr a lo lejos, sus perros se detuvieron en seco, miraron en una dirección y comenzaron a chillar con la cola entre las patas, Zoe y Bobby incluso se orinaron encima, alarmado Will enfoco la luz de su linterna hacia donde miraban los perros y vio unas grandes astas moverse entre los árboles

- tranquilos chicos, es solo un venado -

Pese a sus palabras los perros seguían asustados,  incluso empezaron a retroceder, Winston jalo del pantalón a Will para que retrocediera con ellos, pero Will no veía de que preocuparse, contrario a eso pensó que seria una buena oportunidad para cazar, por las astas podia ver que se trataba de un macho adulto

- vamos Winston, si me ayudas te daré un buen trozo de carne -

Pero Winston gruñó y se aparto de Will, juntándose con sus hermanos caninos, todos chillando de miedo

- ¿que les pasa a todos ustedes? ¿Desde cuando le tienen miedo a los ciervos? -

Will se aparto de sus perros y camino unos metros  entre los arbustos y pinos, en silencio para evitar asustar a su presa,  Will avanzo, justo cuando llegó a donde él venado, sus ojos captaron una visión perturbadora, las astas en realidad no eran de un venado, parecían más bien salir de la cabeza de un hombre vestido de negro, estaba arrodillado dándole la espalda a Will, parecía tragar algo del suelo, Will se ajusto los lentes para ver mejor y vio unos pies humanos, aterrado, Will retrocedió y las hojas secas y ramitas crujieron bajo sus botas, el hombre ciervo de inmediato se levantó, mostrando una altura increíble,  con todo y cuernos media mas de dos metros, entonces volteo en dirección de Will, que al verlo a los ojos quedó completamente paralizado, los ojos de la criatura eran blancos y brillantes, pero en la profundidad Will pudo percibir un color granate, casi marrón que guardaban una chispa de inteligencia humana

- ¿puedes verme? -

Pregunto el hombre ciervo acercándose a Will, quien no pudo responder, solo cayó de rodillas con la boca abierta de la impresión, la criatura alta y huesuda estiro una de sus manos y con sus largas uñas filosas como cuchillos, aparto un rizo de cabello de la cara de Will, cortandole superficialmente la mejilla, Will fue invadido por un calor terrible,  sintió como si su sangre ardiera, mareado por el calor cayó desmayado al instante

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