One shots // Futbolistas

Richarlison

— ¡Eres un cabrón egoísta de mierda! — gritaste con los ojos llorosos al ver las imágenes que aparecían en la pantalla de la enorme televisión del comedor. Miraste con demasiado sentimiento a tu por el momento "esposo". El sentimiento que predominaba en tu mirada era decepción, y en la suya, la culpa. 

Apartaste la mirada hacia la televisión, viendo la exclusiva y observándolo a él junto a una modelo sonriéndose. Conforme cambiaban las imágenes, todo empeoraba. Cada imagen resultaba más impactante que la anterior; al principio, solo eran sonrisitas, hasta que llegaron a un vídeo que mostraba desde una cámara en el ascensor del hotel, donde se veía a Richarlison y la modelo liándose. Eso te destrozó; fue como si todo tu mundo se hubiera venido abajo.

Richarlison había decepcionado "al amor de su vida". La había engañado con una modelo cualquiera. No pensó en su hijo, no pensó en su mujer. Estabas destrozada, pero intentaste tranquilizarte cuando viste a tu hijo presenciando la escena.

— Junior, vete a tu habitación, cariño — suavizaste tu voz, viendo a tu hijo marcharse rápidamente.

— Emily, por favor, déjame expli...

— ¿Explicarme qué? ¿Que me engañaste? ¿Que has destruido nuestra familia? Richarlison, no quiero escucharte. Quiero que te largues de casa. Vete al hotel donde esté la puta modelo esa y quédate allí — intentaste no derrumbarte enfrente suya. Él intentó acercarse a ti.

— Meu Amor, por favor — lo miraste con dolor.

— A ella también le decías "Meu amor". A ella también le decías que era única. Richarlison, por favor, vete. Solo mirarte me provoca repulsión. Solo pensar en que te has acostado con otra y que no pensaste en mí ni un segundo me hace tenerte asco. ¿Pensaste en Junior? NO, solo pensaste en follártela. No pensaste en las consecuencias. Pues ahora tendrás que pagar el precio. Lárgate — dijiste cada vez más cabreada y te giraste, esperando a que se fuera.

Él volvió a intentar acercarse a ti aprovechando que estabas de espaldas. Acarició tus brazos con suavidad para girarte apegándose a ti. No te dio tiempo de apartarlo cuando ya tenías sus labios sobre los tuyos. Estuviste a punto de volver a caer por él y seguirle el beso, pero sacaste la fuerza que no sabías de dónde para hacer totalmente lo contrario.

Richarlison pasó su mano por su mejilla, donde comenzaba a surgir la marca roja de tu mano; él te miró sin creerlo, no esperaba que tú llegaras a hacer eso. Tu mano ardía, pero no te importó; lo empujaste lejos. No le diste tiempo para que reaccionara, lo empujaste hacia la puerta y la abriste.

— Lárgate.

— Emily, de verdad que lo siento. ¿Podremos hablar mañana? Cuando estés menos alterada -Richarlison hablaba con voz suave, sabiendo la gravedad del asunto.

Negaste viéndolo. — Para lo único que hablaremos será para dictaminar los papeles del divorcio junto a nuestros abogados — le cerraste la puerta en la cara y apoyaste tu espalda en la puerta para terminar deslizándote hasta sentarte en el suelo. No pudiste contener tu llanto, solo pudiste tapar tu cara con tus manos.

Sentiste unas manitas apartando tus manos de tu rostro y viste a Junior. Lo abrazaste fuertemente, llorando aún más. — Siento que hayas visto eso, cariño — besaste la cabeza de Junior.

Cuando te calmaste, te levantaste y cargaste a Junior. — Vamos, cariño, hoy dormirás conmigo — fuiste a la habitación de Junior y te acostaste abrazándolo. No podías ir a tu habitación donde dormías con Richarlison. Acariciaste la mejilla del pequeño niño de 5 años que dormía a tu lado. Te regañabas por discutir con Richarlison y que Junior lo viera.

No pudiste contener tus lágrimas mientras mirabas el techo. Tu mano libre la posicionaste sobre tu boca para que no soltaras ningún sonido que pudiera despertar a Junior. Estabas completamente destrozada; nunca esperaste que él actuara así. Durante toda la noche, no pudiste dormir. Simplemente te quedaste mirando el techo, recordando los 7 años que habías desperdiciado con él.

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Siento haber estado tan inactiva, pero me ha pasado de todo desde la última vez que escribí. Además, tengo 26 borradores que he estado haciendo durante meses, pero que no acabo o no sé cómo terminarlos. Siento haber tardado tanto, pero es que en muy pocos meses me han pasado tantas cosas que tengo material para escribir mil historias. Aunque por el momento he hecho este y voy a acabar uno de otro jugador.