yeonjun y soobin son fotógrafos.
yeonjun siempre ha estado en busca de un lugar que fuera su hogar, sin darse cuenta que una persona podía serlo.
Aún así, yeonjun esperaba poder disimular sus sentimientos hacía soobin cuando se da cuenta que está en...
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Soobin llevaba manejando dos horas, era de noche, Yeonjun quería dormir, pero era un último lugar, uno que no estaba en su lista pero Soobin deseaba mostrarle, por eso lo apresuró en el último conociera por alguna razón que Yeonjun desconocía.
— ¿Cuándo me vaya, seguiremos siendo novios? — Yeonjun tenía demasiado sueño como para quedarse con sus propios pensamientos.
— Yo pienso que podemos serlo, ¿tu lo quieres?
— Yo quiero eso tanto Soo, tanto tanto, me gustaría más estar aquí contigo y no separarme de ti — Soobin sonrió antes de voltear por un par de segundos para ver a Yeonjun quién tenía los ojos cerrados pero se negaba a quedarse dormido hasta que llegaran al lugar.
— Eso es lindo Jun, pero deberías pensarlo bien, tu casa, tu familia, tus amigos, no puedes simplemente dejar todo...
— No tengo amigos — susurró — Solo tengo compañeros de trabajo, mis amigos se mudaron, tienen sus vidas, familias y hogares, mi familia entendería, siempre lo hacen y mi casa no importa, ese lugar es como una jaula.
— Jun.
— Te lo juro, lo prometo
Soobin no contestó, pero su aroma era tranquilo, pasó tal vez una hora cuando Soobin dijo que estaban por llegar, sus ojos se abrieron y pestañeo varias veces tratando de acostumbrarse a la luz de los autos y las lámparas. Yeonjun sonrió, era lindo, algo que había aprendido del país era que en todos lugares había algo maravilloso. Tal vez era por que recorría todo con Soobin a su lado.
— Aquí, vamos
— Hmm, Soo, no sé si te diste cuenta pero esto no es un hotel — Solo lo escuchó reír antes de que el alfa saliera del auto, ni siquiera bajó las maletas, así que Yeonjun asumió que Soobin conocía a alguien en ese lugar. El alfa le hizo una seña en la cabeza mientras abría la puerta roja de la librería, Yeonjun ignoró las gotas de lluvia que empezaban a caer y salió del auto, para ir con Soobin. Entró al lugar, había una omega con cabello negro detrás del mostrador envolviendo un libro para un alfa, quien salió solo segundos después con el libro.
La omega levantó la vista, salió del mostrador y corrió a abrazar a Soobin, Yeonjun quiso gruñir, pero el alfa le guiño un ojo a él para tranquilizarlo.
— Con todo el tiempo que pasas en Londres ya mejor mudate para allá — Soobin negó antes de separarse del abrazo.
— No te metas Arin, solo vengo de paso — la omega asintió — ¿Tienes las llaves aquí? — la omega regresó a donde estaba antes, ahí detrás del mostrador y tomó asiento.
— ¿Siempre pierdes las tuyas?
— No es tu asunto — la omega negó mientras buscaba algo, después le dio unas llaves a Soobin.
— Gracias Arin — dijo, se giro para ver a Yeonjun —Vamos Jun
