- El final es cuando todo acaba ⁴⁵

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— Y aquí es dónde se quedarán —la omega Myoui abrió la puerta, dejando pasar a las omegas que estaban esperando

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— Y aquí es dónde se quedarán —la omega Myoui abrió la puerta, dejando pasar a las omegas que estaban esperando. La casa era lo bastante grande para ser estable, así que las omegas se quedaron un poco sorprendidas por lo dado, pero sonrieron al entender que esa sería su casa, su oficialmente casa— Ella las ayudará aquí —la alegría de las omegas se fue cuando la omega Myoui apuntó a una alfa que estaba sentada correctamente en el sofá.

— ¿Vamos a vivir con una alfa? —Miyeon preguntó con un asco inevitable, pero la alfa dentro solo sonrió amable hacia las tres que parecían escuchar lo peor de sus vidas.

Mina rió asintiendo.

— Se nota que no me prestaron atención cuando lo dije —comentó riendo y negando— Alguien tendrá que guiarlas para que sepan todo lo que una persona del reino Im debe saber —sonrió aunque a las omegas no se les contagiaba— Yontararak Nicha, o Kim Minnie mejor, será la alfa que las ayudará en su adaptación a las normas de aquí —la mencionada hizo una reverencia que por lo menos satisfacía a las omegas y lo devolvieron con un asentimiento de cabeza.

Ni de broma le harían una reverencia a una alfa, por ahora no.

— Pueden haber omegas o betas también para que las guíen, pero hay otros personas que también necesitan a personas de estos géneros, ya que ellos les tienen pavor a alfas, y ustedes solo un odio y desprecio. Por favor, aceptenla a ella como su guía y cuestionen lo que crean necesario —les dijo, viendo como una guardia entraba y dejaba una maleta en el sofá.

Eso era todo su equipaje por ahora, luego compraría más para ellas.

— Realmente espero que puedan vivir tranquilamente aquí. Antes de irme, agradezco de nuevo su ayuda en la guerra con Kang, todo lo que vivirán aquí es su recompensa por lo que brindaron y por el peligro al cual se enfrentaron —las omegas prefirieron no decir nada al no encontrar palabras y solo asintieron con una sonrisa en sus rostros.

Les abrumaban las buenas acciones tan abruptas.

Cuando terminó aquello de la guerra y solo quedaban cabos sueltos que el reino Im estaba arreglando, ellas fueron llevadas al castillo Kang para que revisaran sus heridas superficiales, les dieron de comer muy bien, las hidrataron lo suficiente, les dieron camas de verdad donde tuvieron un sueño tan profundo, y ahora les daban una casa propia en una zona muy rica del reino Im.

'Ayuda y obten tu recompensa', Miyeon recordó en ese momento mientras veía el interior de la casa.

Cuando la puerta fue cerrada y las omegas se quedaron con la alfa, todo quedó en silencio mientras la alfa anotaba algo en una libreta.

— Bien. Seo Soojin, Yeh Shuhua y Cho Miyeon, ¿no? —la alfa preguntó amable y las omegas se tensaron.

— ¿Cómo sabes eso? —Soojin preguntó con el ceño fruncido.

— La princesa Mina me dió la información de ustedes —informó viendo su libreta y regresando la mirada a las omegas— Desde hoy, estoy a su disposición a lo que deseen —dicho eso, se arrepintió al ver los ojos de las omegas brillar en malicia— No soy una sirvienta. Me refería a que si tienen cualquier duda sobre el reino Im, yo contestaré las que pueda, o investigare si no me las sé —les bajó los intereses a las tres chicas.

SU MAJESTAD ♡ MINAYEONDonde viven las historias. Descúbrelo ahora