Chupalo entonces. Lo siento, era totalmente necesario, ahora sí a la historia.
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-Ya les dije que no tengo nada con Spider es como un hermano para mí!
- Ma'Luna debes entender que así somos los Na'vi, posesivos con nuestras mujeres.
-Lo entiendo Neteyam pero-
-Ese no es mi nombre
-Qué?! Claro que lo es!
-No, cuando nos unimos solo respondí a un nombre
-Es enserio?! Agh, ok, Ma'Teyam
-Si, Ma'Luna?
- Sé que muchas cosas de mi vida cambiaron cuando decidí quedarme en Pandora, pero no pueden ustedes aprender algo de mi cultura?, Los humanos pasaron muchos años tratando de erradicar el machismo saben?
-Qué es machismo?- Ao'nung iba agarrando a Luna de la cintura, al preguntar apoyó su cabeza en el hombro de la fémina mirándola con curiosidad.
-Es una ideología, Ma'nung. Es cuando el hombre cree que tiene derecho sobre el cuerpo y el ser de una mujer.
- ... Pero es nuestro derecho.
-Perdona?!
Luna se movió bruscamente haciendo que Ao'nung se separara sobando su barbilla.
-Ma'Luna, los Na'vi al unirse se vuelven dueños de su pareja, somos tuyos y tú eres nuestra.
-No, no acepté eso!
Neteyam volteó brevemente mirándola con el ceño fruncido.
- Así lo dicta Eywa Ma'Luna.
-Pues me importa un bledo lo que Eywa piense.
Ao'nung acarició los hombros de Luna haciendo que diera un salto por la impresión.
-Ma'Luna, no puedes hablar así de Eywa.
- ... Yo no les pertenezco, ni hoy, ni mañana, ni nunca, soy mía y solo mía al igual que yo no soy su dueña.
-Ma'Luna... No vamos a discutir esto. Las cosas son así y punto. Y no quiero que vuelvas a acercarte a Spider.
-Es verdad Ma'Luna. Por favor, cumple tu deber de pareja. Además debemos decidir el nacimiento del primer bebé. Ahora mismo podríamos planearlo.
Mientras Neteyam y Ao'nung hablaban Luna se había desconectado de la conversación. Entonces lo sintió. Como si una chispa creciera con fuerza en su interior. Una sensación conocida.
Suspiró mirando sus costados. Estaban llegando al bosque de Pandora. Miró la estructura de los árboles y comenzó a planear. Según sus cálculos Quaritch y su base estaban a unos 40 kilómetros al norte de ahí. Ellos iban al este.
-Pensaba en el nombre Inas si es niña y Manu si es niño. Tú qué opinas Ma'Luna?
-Eso no me importa, Ao'nung.
-Eh?
-Ustedes no piensan cambiar por mí cuando yo cambié hasta de especie por ustedes.
-Ma'Luna no vamos a pelear contigo, así que por favor basta con ese tema.
Terminada la frase de Neteyam Luna dió un codazo a Ao'nung haciendo que la soltara y con velocidad se lanzó al vacío.
Neteyam intentó atraparla con su ikran. Pero luna logró agarrarse a una de las ramas y comenzó a correr entre los árboles haciendo que los chicos la perdieran de vista.
Buscó un agujero en uno de los árboles y al entrar pudo notar que era lo suficientemente grande como para caer sentada y no estar incómoda.
Se quedó ahí y cerró los ojos. Esperaría un rato a que se aburrieron de buscar y cuando ellos desaparecieran ella iría en búsqueda de Quaritch. Era hora de acabar con todo esto. Era hora de que existiera paz.
Entonces, cuando estuvo sola pensó. Realmente quería estar con ellos por el resto de su vida?, Es decir, los "amaba" pero parecía ser la única. Ella estaba dispuesta a muchas cosas, pero jamás doblegarse, peleó tanto para ser respetada como una mujer joven con un cargo militar alto y no iba a lanzar todo eso a la basura por un par de idiotas hormonales.
Suspiró pensando que quizá no era muy tarde para buscar la forma de ser humana otra vez o quizá escapar al sur, a las tierras heladas de los Na'vi de nieve. Sin duda alguna nunca la seguirían hasta ahí.
Luna salió de su trance al notar como todo comenzaba a oscurecer. El eclipse había llegado. Asomó la cabeza y una vez que confirmó que no había moros en la costa comenzó a correr hacia el norte, Ja! Sería fácil.
Tenía raspaduras por todo el cuelo, unas plumas de colores en su cabeza y una irritación en el trasero por orinar cerca de una planta que aparentemente era venenosa.
-Mierda, odio el bosque.
Apenas terminó la frase pudo ver la estructura de hierro levantándose frente a ella.
Caminó hacia la entrada levantando las manos. Rápidamente dos avatares se acercaron pidiendo identificación mientras la apuntaban con sus armas.
-Soy Luna Martínez!, Buscó al coronel Miles Quaritch!
-Luna!
Unos brazos paternales la abrazaron pro detrás, ella correspondió el abrazo dándose vuelta.
Sabía que había peleado contra él y todo eso.
Pero ser abrazada por él era la sensación más cálida y pacífica que tenía en el mundo. Un abrazo de papá sana todo corazón roto.
Y así, una a una, sin su permiso, lágrimas escaparon de sus ojos.
-Oh... Vamos cabo bebé, los soldados no lloran...
Quaritch intentaba limpiar sus lágrimas, pero al no dejar de salir decidió simplemente volver a abrazarla mientras acariciaba su cabeza.
- Qué sucede, cariño?
-Me pelee con mis novios alienígenas... Los odio demasiado ahora mismo!
-Seguro fue culpa de ellos, tú eres perfecta...
Luna tomaba el delicioso café caliente que su padre había preparado para ella. Era envuelta por una manta y conversaba con su padre y otros militares de alto rango. Tal parecía que su padre inició un movimiento de revolución armada. Logró motivar no solo a los de la base, también a gente de la tierra. Apenas quedaban gobiernos en pie y ya comenzaban con planes de enviar civiles a Pandora mientras militares y profesionales limpian y recompone el planeta usando ADN de recursos de Pandora o tomando agua congelada de otros planetas.
-Dejen de explicar cosas tan difíciles. Mi pobre niña acaba de pelear con los idiotas que tiene por novios.
-Con gusto me ofrezco como tributo!
El comentario de un joven soldado hizo reír a los demás, pero Quaritch lo miró como si quisiera descuartizarlo.
-Tranquilo, pa... Debemos mandar una carta a Spider, ya quiero que vea todo esto!
Quaritch sonreía emocionado ante la emoción de Luna, luego su cara se volvió sería.
-Cariño... Qué harás tú?
-Yo?
-Sí... No quieres volver a la tierra con nosotros?
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E Y W A : ✧*。ole ngati kameie *。✧
FanficLuna Martínez. No era científica, ni sabía botánica. Pero fue recomendada por el Coronel Miles Quartich, antes de su trágica muerte, para proteger a los biólogos marinos que investigarían Pandora. Luna escuchó historias de terror sobre Pandora. pero...
