Idiota |Shinkami|

4: Sentimientos

Por alguna razón, la rutina de Shinso se había vuelto más común de lo normal; todos los días después del trabajo iba a su departamento compartido con Monoma, dejaba sus cosas y cocinaba algo para cuando él llegase.

Desde la academia Neito había conquistado el corazón de Shinso, con sus alagos hacia él y sus noches despiertos en la sala común del curso B. A pesar de tener la amistad sincera de Kaminari, cuando estaba con Neito se sentía completo.

Él había visto el potencial que tenía Shinso, incluso antes que el resto, él lo ayudó a entrenar para ascender al curso de héroes, simplemente Neito se había convertido por mucho tiempo en su pilar emocional.

—Buenas noches Toshi —saludó el rubio cuando Shinso ingresó al departamento.

—Hola Nei —respondió acercándose para besarlo en la frente.

Monoma se apartó del beso antes de que fuese dado, hace algunos días ambos tuvieron un discusión algo fuerte, por lo que el resentimiento seguía dentro de él.

—Iré a la tienda por huevos para la cena ¿Quieres algo? —consultó el menor indiferente.

—No, no gracias.

Y con esa respuesta Monoma salió del departamento dejando a su mayor nuevamente con muchos sentimientos sin comprender.

¿Eran amigos? ¿Eran amantes? ¿Estaban enojados?
Hace mucho tiempo Shinso sabía perfectamente que responder a esas cuestionantes, pero ahora estaba perdido.

No podía controlar las emociones y acciones de Neito, y desde que habían discutido aquella vez, él se comportaba muy distinto al Neito del cual se había enamorado.

Mientras pensaba en cada uno de los momentos vividos juntos, Shinso sacó un par de cervezas para aplacar todas las emociones que había tenido ese día.

Por un lado Monoma lo daba por hecho, ya no era atento ni parecía interesado en él, su relación parecía un fiazco, como si estuvieran juntos por la costumbre y el sexo.
Pero no podía dejarlo, él fue su primer amor y olvidar cada momento que vivieron juntos sería como olvidar una gran parte de su vida.

Por otro lado, al estar tan aferrado en salvar la relación que alguna vez tuvo con Neito, lastimaba a Kaminari. Lastimaba a su mejor amigo de la academia, aquél chico que lo ayudó a declarase a Neito, aquel chico que no lo hacía menos por tener un Quirk peculiar.

Las lágrimas que Kaminari había derramado horas antes en la agencia se convertían en dagas al corazón de Shinso ¿Cómo fue posible que él fuera el responsable de destrozar ese frágil corazón?

Sabía lo que Monoma opinaba sobre su amistad con él, sabía que Kaminari era la persona a quien Shinso acudía cada vez que ellos se peleaban y eso lo molestaba mucho. Y aún sabiendo eso, Shinso seguía acudiendo a Denki.

¿En qué momento se había metido en todo este lío sentimental?

—Soy un héroe —se dijo a si mismo mientras terminaba su tercera cerveza— no tengo tiempo para cursilerías ¡De todas formas no importa donde esté, jamás seré feliz!

Mientras dejaba a un lado las botellas vacías, Shinso se levantó y comenzó a quitarse su tre de héroe, quedando simplemente en boxers y calcetines.

Se oyó como la puerta fue abierta, Neito había llegado, dejando las cosas en la cocina

—¿Qué estás haciendo? —preguntó confundido el rubio al ver a su pareja semidesnudo en el comedor

—Te diré lo que haré —Shinso se acercó tambaleante hacia él— tu y yo tendremos sexo aquí y ahora.

Tras decir aquello, Shinso tomo de las mejillas a Monoma y lo acercó a él para besarlo. El rubio se alejó tras rozar sus labios, confundiendo al mayor.

—No puedo creer que te embriagaste tan rápido. Sólo me fui por 20 minutos  —dijo con un tono burlón— sé que tus intenciones son buenas pero no podrás arreglar nada con sexo.

—No me importa

—¿Qué?

—Ya no me importa si arreglo las cosas o no, me metí en un lío de estúpidos sentimientos, quiero salir de eso.

—¿Y qué? ¿Yo soy tu única opción?

—No pienso compartir la cama con nadie más, tu eres mi primer y único amor —Shinso se acercó a él y lo besó con dulzura, está vez si fue correspondido por el rubio— no soporto estar enojado contigo, por favor solo cúmpleme este deseo.

El tono de Shinso había pasado de autoritario a súplica, Monoma lo sacaba de sus casillas y lo confundía demasiado, pero ahora mismo él era lo único que tenía y lo necesitaba.

—Esta bien Toshi, hagamoslo —Neito acarició con dulzura la cabellera de Shinso y continuaron con los besos mientras se dirigían a la cama.

Sip, esa se había convertido en su rutina. Discusión, condescendencia, confusión y sexo.

Sabían que esa relación no era sana, pero les funcionaba. Ambos no podían soltar al otro, pero tampoco sabían cómo manterlo a su lado.

~Talita

Enserio lamento la demora, estaba con un bloqueo horrible.

Muchas veces quise continuar la historia y no me salían las palabras. Incluso volví a leer el fic y no podía creer que yo lo había escrito.

Tengo muchos planes con esta historia, simplemente tenganme paciencia.

Se los quiere.