𝚂𝙴𝚇𝙾𝙽𝙼𝙸𝙰 |ᵇʸˡᵉʳ

‧₊˚ ୨005୧ ˚₊

-¿Qué? ¡Oye, suéltame, idiota! -EI cuerpo de Mike sobre el mío me impedía el movimiento ¿¡Qué mierda le pasa!?.

El no contestó. Por un momento pensé que estaría bromeando, sin embargo, su desnudez y su silencio desecharon esa idea. Intenté mirarlo a los ojos, pero su cabello me lo impedía. Miraba hacía bajo, no estoy seguro de que, empezaba a asustarme. Parecía... ¿Dormido?.

-Michael...-Le hablé moviéndolo un poco de sus brazos. Pero no respondió . Siguió en la misma posición: sobre mí y su rostro perdido -Mierda, Michael, ya... - De un movimiento repentino, mis manos fueron arrastradas hasta quedar sobre mi cabeza y mis brazos extendidos en mi contra. El se encargó de sujetarme con fuerza, demasiada. Levanto su rostro hasta dejarlo, por fin, enfrente el mío. Sus ojos estaban oscuros y su melena se ceñia en su frente.

-Vuelve a decir mi nombre...- Su voz era grave, más grave de lo que normalmente es - Y te follare duro y sin compasión- Mi cuerpo enteró temblo por la amenaza ¿¡Esta hablando encerio!? Mierda, Comienzo a asustarme.

-Mike, deja de jugar. Si esto es una broma, quiero decirte que no es graciosa, porque... - Una de sus piernas se colocó entre las mías y las separó de golpe, Interrumpiendome.

-Te lo dije...

-¿Qué? Oye, yo no... - Una de sus 1 manos cubrió mi boca, mientras otra me seguía sujetando. Y ahora sí me asusté. Escondió su rostro por las curvas de mi cuello y sentí un escalofrío cuando lo punta de su lengua recorrió mi piel fría. Lo hizo sin ninguna clase de gracia o mentirá impregnado en el acto.

Como si yo no fuera su mejor amigo o como simplemente no fuera yo.

Intenté liberarme, pero era demasiado fuerte, mierda. Cuánto odio que el idiota mida 13 centímetros más que yo. Comencé a llamarlo, no obstante, su mano me impedía hablar con claridad.

Ay no, ahora sí estoy asustado.

Mike descendió su cabeza, pasando su lengua por mi piel. Depósito una mordida descuidada en mi clavícula que logro erizarme por completo mierda, Allí no.

Apartó su mano de mi boca.

- Michael, ya. Quítate - Ordené en cuanto quede liberado. Sin embargo, el solo me ignoró y colocó su mano sobre el lugar menos inapropiado

- No...- Comenzo a masajearme con la palma de su mano con movimientos circulares-No toques Allí... - Suspiré en voz baja. Su gran mano siguió acariciando, cambiando su trayectoria y haciéndolo de arriba a abajó... Mierda... Se siente bien-Mike, no... Y-ya deja... - Rogué con voz temblorosa. Su mano entera se cerró sobre mi nueva erección por sobre mi ropa - ¡Michael! - Joder... ¿Por qué lo hace tan bien? ¡Pero, no! · mi...mike, ya, esto no... Alzó su mano y la metió dentro de mi pantalón de pijama y el bóxer. Toda su mano sujeto mi pene erecto, amoldandolo en su palma caliente. Gemí.

Oh, dios, no. esto no es correcto.

- Sí te gusta...que quieres?-Sus roncas palabras sacudieron mis sentidos por completo.

Que me toques... H-hazlo rápido, mikkie... -Rogué.

No sé si sentirme humillado. Avergonzado. Enfermo. Sucio. O perra en celo... Lo único sé es que quiero esto. Aunque sea con Mike.

Debería ponerme a pensar en que esto podría afectar a nuestra amistad, mañana que nos despertemos y nos miremos a la cara, incluso así... Bueno, no es fácil pensar en eso con una mano en mi pene. Con la mano de Mike en mi pene.

Mierda, Suena extraño. Pero me gusta.

La mano de Mike comenzó a estimularme nuevamente, solamente que ahora lo hacía más rápido, justo como le rogué que lo hiciera. Cerré mis ojos nuevamente, disfrutando de la sensación que invadía mi cuerpo entero. Mis brazos libres bajaron hasta rodear su cuello.