제16장. Capítulo 16.

222 14 1
                                    

Eras una especie de punk rock
Crecí en hip hop
Pero me encajas mejor que mi suéter favorito
Y sé, que el amor es malo, y el amor duele
Pero todavía recuerdo ese día
Nos conocimos en diciembre

Blue Jeans. ── Lana del Rey.

흑고니

1999.

El timbre de la escuela resono en todo el lugar dando por finalizada las clases hasta la próxima semana dando inicio al fin de semana. Todos los alumnos salieron como siempre haciendo escándalo estando alegres de que por fin el día viernes había llegado. Entre esos estudiantes salía Seo Soojin junto a sus amigas, las cinco planeaban que hacer el día de hoy; si ir de fiesta o hacer una pijamada, de todas formas mañana irían a ver si iban de compras o no. Soojin se despide de sus amigas cuando llegan a un acuerdo, se queda en la parada de autobús para irse a su casa o como ella le decía; su miserable vida. Si, Soojin odiaba su casa, detestaba vivir y venir de una parte tan corriente de Corea, ella le decía barrio donde las casas eran pequeñas o medianas y no de esas grandes que a ella tanto le gustaba.

Se sube al autobús que la llevaría a Ahyon-dong; allí es donde vivía ella, un barrio de clase baja de Corea, en en otras palabras, un lugar humilde en Seúl. Mientras ella miraba por la ventana, sólo pensaba y deseaba vivir en otro lugar, cerca de Seúl o en Gangnam, el lugar donde sólo los ricos de Corea del Sur viven, ella siempre se imaginaba una vida distinta a la que tenía, que fuera nacido en cuna de oro y no en una cuna de clase baja en un lugar que no le gustaba vivir. Soltó un suspiro al ver que ya había llegado a su destino, salió del autobús caminando hacia el lugar humilde de Seúl. Los vecinos y las personas que vivían ahí se preguntaban como alguien que viene de aquí estudia en una escuela cara y privada de Seúl, su uniforme era caro e impecable, Soojin siempre se aseguraba de estar impecable y jamás desaliñada. Las personas de aquí la veían como si fuera poca cosa a pesar de que ella aparentara ser otra clase de persona, no una baja, sino alta con la ropa que se compraba, zapatos, maquillaje, bolsos, empezaban a creer que tal vez ella se vendía, pero sólo era un falso rumor que les gustaba inventar para fastidiar, la realidad era que su hermano mayor que estaba en el extranjero y era empresario, le mandaba dinero a ella y a su familia y se aseguraba de que no pasarán hambre y vivieran mejor, pues el dinero le sobraba.

No era un secreto que el orgullo de sus padres era su hermano mayor, ella jamás busca forma de imprecionarlos, sólo vive su vida y se concentra en ella a pesar de que eso genere un cierto desagrado, sus padres querían lo mejor para ella, pero Soojin sólo deseaba escapar de esa pobreza de barrio y tener una mejor vida. Ella suelta un suspiro cuando llega a su casa, abre la puerta con su llave y se quita los zapatos dejándolos al lado de la puerta con los demas, se pone unas zapatillas de casa, apenas sale del pasillo de la entrada, ve a su madre limpiando la sala.

── ¿Saldrás hoy?. ── es lo primero que le pregunta al verla llegar. La madre de Soojin sabía perfectamente que al ver su hija de buen humor los viernes significaba que saldría de fiesta o iría a una pijamada o haría una pijamada.

── Si, mis amigas yo iremos al mismo club de siempre, no me esperes despierta, como siempre. ── se voltea para irse a su habitación pero la voz de su madre la detiene.

── ¿No te cansas de eso, Soojin?, ¿no piensas en otra cosa que verte bien, salir de fiesta y en comprar?, ¿no piensas en tu futuro?. ── Su madre la veía con reproche y cierto enojo. ── ¿en qué te vas a dedicar?.

Soojin estaba cansada de ese asunto, de ese sermón, la tenía agobiada y cansada. Su madre también estaba cansada del estilo de vida que llevaba su hija, ambas estaban cansadas de este tema.

Black Swan [+21]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora