𝕯𝖆𝖗𝖐𝖘𝖎𝖉𝖊 ||
Ciara Black había deseado toda su vida que alguien la comprenda como se sentía, pero nadie lo intentaba solo la juzgaban, así que decidió huir del pueblo Gavaldon aquel lugar donde no la sacaban de rara.
Pero los planes que tenia...
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"Dark Dreams"
En la mañana, dentro de una cabaña donde vivía una madre soltera con su hija, en una habitación llena de cruces en las paredes los cuales parecían moverse, una chica se removía en su cama mientras sudaba.
Soñaba que esta rodeada encerrada en una habitación oscura mientras se oía murmullos, los cuales no escuchaba del todo bien.
Ciara finalmente se levantó sentándose de su cama, las cruces por fin dejaron de moverse, la joven que estaba con la respiración agita parecía estar calmándose para luego ir a darse una baño, como si nada hubiera pasado.
Ella que tenía pesadillas todos los días, era algo ya normal y no se asustaba de ellas, pero deseaba ya no tenerlas.
Una vez ya arreglada fue a la cocina donde su madre preparaba el desayuno.
— Buen día, ma — saludo Ciara a su madre, la cual servía el desayuno — Mmm.. esto huele delicioso —
—¿Volviste a tener pesadillas? — pregunto Elena
— Ya no — mintió, ya que sabía que si decía la verdad a su madre, ella se volvería aún más paranoica de lo que ya está - Ya no las tengo desde que pusiste una biblia bendecida debajo de mi cama -
Ambas se sentaron para empezar a desayunar
—Eso es bueno — Elena sonrió — Pero por si acaso, volveremos a ir a la iglesia después del desayuno —
Ciara solo asintió a las palabras de su madre, después de todo ella no podía negarse a los pedidos de su madre.
El resto del desayuno la pasaron en un completo silencio, cada una sumergida en sus propias pensamientos.
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Madre e hija se encontraban de ida a la iglesia dentro del pueblo de Gavaldon, la menor caminaba mirando vista abajo, como si la tierra y el suelo fuer lo más interesante.
Prefería mirar el suelo que mirar la miradas juzgadora de los habitantes de Gavaldon, su madre y ella no tenían la mejor reputación en el pueblo.
La familia de su madre, Elena Black cuando era una joven había escapado del pueblo por un tiempo y cuando volvió al pueblo de Gavaldon, estaba embarazada de ella.
Estar embarazada no era nada malo, pero los habitantes del pueblo no lo veían así, después de todo nadie conocía quien el padre de Ciara.
Los padres de Elena eran religiosos y al enterarse de que Elena había tenido una hija antes del matrimonio era algo imperdonable, así que la repudiaron.
