Pasado

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Sé que contigo me sentiré como Lara Jean haciendo cartas para todos los chicos de los que se enamoró. Con la diferencia de que yo no me enamoré de ti. ¿Para qué buscar culpables? Ya todo acabó de un modo u otro y no vale la tortura de inventar excusas. Quizás en el fondo fui infiel aunque no éramos nada. Quizás confíe demasiado en la mentira de que la distancia no importaba y podíamos sobrevivir. A veces uno confía en cosas que no cree en verdad solo para inventarse la luz al final del túnel que te obliga a continuar resistiendo porque puede que en un futuro cambie. Cambiarías tú y nuestra relación, incluso yo si fuera necesario. Pero entendí algo y es que si tengo que ser transformada en algo debe ser por mí, no por alguien más porque aunque no soy perfecta es probable que alcance a alguien con mi forma de ser. Tú no entendiste eso y me llamaste por nombres que no me pertenecían. Sufrí y no lo sabías porque nuestro contacto se limitó a una pantalla y kilómetros y más kilómetros de mensajes en WhatsApp. Interminables, aburridos, ofensivos, el menú poseía para todos los gustos e incluso cuando me costó aceptarlo supe que yo no encajaba en tu gusto. Te enamoraste de alguien que no soy y nunca fui y yo me equivoqué en fingir. Al parecer mi corazón jamás tuvo valor para ti por el modo en que lo desechabas sin razón teniendo como excusa que yo no era suficiente ¿Lo eras tú? Nunca pude exigir. Pero no todo fue malo, sí me provocaste mariposas con tu risa a través del teléfono. Esperaba con nerviosismo los instantes cortos en el que compartiríamos miradas. Nos vimos muy poco, sí, pero te quería y aún te quiero aunque ya no sea igual. Me pregunto si tú quieres volver al pasado. Si yo misma quiero regresar a los días en los que me dejabas de lado o me hacías sufrir. No, a eso no quiero volver. Tampoco a los momentos felices, supongo...

Susurros del corazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora