Ofrenda de paz

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Te he dejado de último, pero no es porque no seas importante para mí, sí lo eres, aunque creas que no y te voy a confesar que extraño los tiempos en los que nada era complicado, los extraño pero no volvería atrás, creo que es mejor dejarlo todo como está ahora, en calma la tormenta, cada uno por su lado. Es que nunca fue mi intención que la situación se volviera difícil. Pero pasó y desafortunadamente ya no se puede transformar. Leí cada uno de tus mensajes, los analicé pero no quise tomar la decisión de decírtelo y quizás fue porque no tenía qué decir, en mis labios no estaban las palabras correctas, palabras que reconstruyeran porque eso era lo que deseaba, no el caos. Sí me sorprendieron tus actitudes y puede que haya reaccionado mal al principio pero ya te liberé hace tiempo y todo está perdonado. No sé si aún sientas lo que me confesaste pero yo no puedo mentir, no lo he sentido nunca y no lo siento ahora. Entiendo que hayas querido encontrar alguna manera de descargar todo lo que te estaba abrumando el corazón, yo también lo hago más veces de las que pudieras imaginar pero no puedo prometer algo en base de sentimientos que no guardo, pero sí guardo los recuerdos y te tengo mucho aprecio.

Susurros del corazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora