capítulo 7

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Sanzu me tiro en una cama con brusquedad haciendo que rebotara y callera al piso.

TN—auch!!—al caer de golpe rápidamente rin vino haci a mi.

Rin—serás bruto ten cuidado—dijo mientras me alzaba.

Sanzu—ya cállate y ponla en la cama—respondió sacándose la camisa que traía.

Al ver como me rodearon me sentí tan indefensa, como una pequeña presa que esta acorralada por su depredador, por el miedo mi voz no salía, no podía decir nada.
Delante de mi estaba sanzu, a la derecha ran y a la izquierda rin, mientras sanzu se tiro encima mío los otros dos me sujetaron de ambos brazos, sanzu se empezó a acercar más a mi rostro y susurró.

Sanzu—con tan solo verte me la dejas dura—al decir eso me empezó a lamentable la oreja.

Al oír eso me acordé de aquel tipo que había entrado a la casa de Alexander aquella noche.

TN—eras tú, t-tú fuiste el que estaba aquella noche cuándo  me mude.

Sanzu—aww me recuerdas, eso solo me tienta más.

Estaba aterrorizada, ello estaban totalmente locos, comencé a pensar en que otro momento habrán estado tan cerca de mi, pero eso fue interrumpido cuando sanzu comenzó a romper me blusa y en el momento que empezó a desabrochar me brasier, comencé a patalear logrando golpearle en sus partes bajas.

Sanzu—OOH!! MIERDA, ERES UNA PERRA.—dijo agarrándose su miembro encima de su pantalón.

Ran—eso tuvo que doler—respondió comenzando a reírse fuerte con su hermano.

Sanzu—oh mierda! Donde hay hielo.

Rin—en el freezer, en la cocina.

Sanzu—ya vuelvo—dijo mientras se iba cojeando.

TN—espero que se te caigan tus huevos!!

Ran—ooh...nena, me estás provocando cada vez más y solo hay una manera de solucionar eso—hablo aun sujetando mi brazo.

TN–a ti también te pateare tus huevos idiota—tenía tanto miedo que no sabía lo que hacía pero no quería que me hicieran algo.

Rin—y a mi me patearas también?—dijo poniendo su rostro cerca del mío.

TN—y-yo—al acercarse a mi me sentí algo rara, por alguna razón al verle a los ojos parecía que no me aria daño—yo nose.

Rin—estas algo roja, sabes.

TN—a-lejate de mi, aho-ra—dije girando mi rostro hacia un lado.

Ran—oooh....que romántico, yo también quiero pero a mi manera—dijo sonriendo lujurioso.

Intenté zafarme del agarre de ran pero cada vez apretaba más fuerte, tanto que empecé a soltar una lágrimas pero lo único que sé me ocurrió fue suplicar.

TN—por favor no me agas daño.

Ran—no te haremos daño si haces todo lo que te pedimos nena.

TN—por favor solo hoy déjenme...mañana...haré todo lo que me digan.

Rin—consideralo ran, no podremos hacer nada si se reciste tanto.

Ran—está bien, más vale que mañana te comportes mejor o si no te obligaremos—dijo mirándome de re ojo.

TN—se los prometo pero déjenme sola por
hoy—ambos hermanos me soltaron y empezaron a camir haci la puerta.

Sanzu—YA ESTOY BIEN, en donde nos queda- pero adonde van, que paso.

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