Estela, una escritora en ascenso, encuentra el amor en el Gran Premio de Fórmula Uno con el piloto italiano Alan Giordano, pero su relación se enfrenta a varios obstáculos ¿Podrán superar todas las adversidades?
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Lo que ocurre en el pasado vuelve a ser vivido en la memoria.
- John Dewey -
Jueves, 25 de Mayo de 2023, La Manzanera, Asturias
A los laterales del pequeño escenario, ella esperaba con incertidumbre a que el hombre sentado en la mesa pronunciara las sílabas exactas de su nombre. Sus oídos se mantenían atentos al extenso discurso del organizador del evento, mientras su amiga Mitra, quien también estaba involucrada en la feria del La Manzanera, permanecía junto a él como su compañera en la entrevista. Ambos expresaban su gratitud por la asistencia de todos los presentes, cuyos rostros colmaban las butacas del abarrotado salón de actos, ubicado en el corazón del recinto ferial.
Ella anhelaba que aquella situación acabara pronto. Deseaba que la llamaran de una vez para la maldita entrevista y poder abandonar ese lugar que parecía asfixiarla. Sentía su cuerpo agitado, al borde de desbordarse por completo, llegando incluso al punto de sentir cómo sus piernas se quedaban completamente paralizadas. Cuando el organizador de la feria del coleccionismo posó su mirada sobre ella, supo lo que debía hacer.
— Y ahora, es un honor presentaros a la protagonista de esta mesa redonda, a una escritora de renombre y autora de la obra de éxito del año; "Buscando las Olas". — anunció el organizador del evento con un gesto que denotaba un interés casi voraz, como si su deseo fuera estar en compañía de la última celebridad del momento. — Por favor, den una calurosa bienvenida a nuestra querida invitada, Estela Costa.
Mientras Estela escuchaba esa invitación y se fijaba en el interés insaciable de aquel hombre, su mente comenzó a divagar por los recuerdos que la inundaban. Rememoraba los días en los que su presencia en la feria del coleccionismo pasaba desapercibida, como si fuera un fantasma o una simple espectadora más.
<<Ahora me pueden ver>>
Esa frase resonó en su mente como un eco constante. El mismo organizador, un apasionado de los animes y poseedor de varios libros sobre ellos, solía tratarla con indiferencia en el pasado. Estela recordaba con claridad aquel encuentro frustrante en el que, junto a su hermano, se acercaron a él con la esperanza de obtener un autógrafo suyo. Pero en aquel entonces, sus ilusiones fueron aplastadas al ser ignorados y ver como su petición quedaba en el olvido. Aquel episodio se había quedado grabado en su memoria, un doloroso recuerdo que se mezclaba con el vacío dejado por la pérdida de su amado hermano dos años atrás. Siempre se había sentido invisible a los ojos de los trabajadores del recinto ferial, pero ahora las tornas habían cambiado.
<<Nunca olvidaré cómo me hicieron sentir>>
Esa sensación de insignificancia quedó grabada en lo más profundo de su ser. A pesar del temor que le daba estar frente al público, supo mantener la compostura gracias al rencor que se adueñó de todo su ser. Subir a ese escenario se convertía en la oportunidad de mostrarles a todos los presentes que alguna vez la ignoraron o la trataron mal. Ella merecía ser escuchada y eso le dio fuerzas para dar el primer paso, encaminándose directamente hacia la mesa de ese escenario y acompañada por el prolongado sonido del aplauso de los presentes en el auditorio.
