𝑀𝑎𝑠𝑞𝑢𝑒𝑟𝑎𝑑𝑒 ~𝐿𝑒𝑣𝑖𝐻𝑎𝑛~

𝑋𝐿𝐼 𝐻𝑖𝑠𝑡𝑜𝑟𝑖𝑎, 𝑀𝑎𝑠𝑞𝑢𝑒𝑟𝑎𝑑𝑒

Pasaron dos horas desde el anuncio de Traute a Kenny y todos los involucrados en la cafetería, el auto blindado se acercaba al punto que había sido alejado del asunto policial por órdenes del ejecutor líder, ahora en el asiento posterior estaban Levi y Armin concentrados en una aparato pequeño pero muy funcional, Levi sabía que no servía de nada en absoluto ir hasta ese punto si no hubiese sido por la previa intervención del rubio quien tras escuchar la noticia hace horas en medio del caótico momento irrumpió dando una solución que el azabache agradecía sigilosamente recordando cómo su postura había colapsado y pasó de la frialdad e indiferencia a una actitud hosca y agresiva cuando escuchó a Traute mencionar que ni su esposa o ese simio estaban en el auto que de por medio estaba abandonado tras un choque, fue cuando Levi se acercó iracundo a Kenny para tomar el teléfono buscando respuestas en la rubia del otro lado de la línea para luego ser detenido por Erwin pidiendo firmemente su calma, seguramente todos los mocosos presentes además de Moblit y Kenny debieron resultar desencajados cuando vieron que el Ackerman en su pérdida de la noción ante la emoción gestante lanzaba un golpe al aire dándole a Erwin en todo el rostro, tanta fue la sorpresa que hasta el mismo Levi quedó estupefacto buscando estirar su mano para que su líder se incorporase mientras esbozaba una disculpa, mientras eso sucedía Levi repetía para sí mismo en un susurro lo suficientemente audible para su amigo e incluso comprensible para los demás.

~La tienen... no sé dónde está... la he perdido mierda...

Por un segundo esa vulnerabilidad jamás vista en el heredero de los ejecutores fue expuesta frente a los chicos y sus dos amigos más su tío, todos perfectamente sabían que lo que mencionaba Levi era certero, quizá la tenían totalmente incomunicada e incluso puede que Zeke esté muerto, "ojalá sea así" pensaba el azabache enclaustrado en su pensamiento inmerso en una desesperación total, sin embargo su mente lo torturaba más, aunque odiara al simio rubio algo no estaba del todo claro o al menos en sus cálculos mentales parecía dar a una única respuesta tras analizar brevemente el estado de la situación informada por Traute, al parecer Zeke traicionó a Rood Reiss e inmediatamente fueron capturados, de no ser así entonces ¿Para qué el choque de autos?... no había ninguna esperanza ante esa deducción, si estaban ambos secuestrados era un todo contra todo ante la presencia temeraria de Reiss, mientras toda esa letanía cruel y siniestra divagaba por la mente del azabache una voz firme pero dudosa habló atrayendo la atención de todos.

~Nosotros aún tenemos la ubicación de Hanji.

Los ojos atentos de los más adultos se enfocaron en Armin Arlert quien estiraba la mano en dirección a Connie y Sasha siendo esta última quien apresuradamente sacaba de su mochila un tanto avejentada un aparato pequeño ensamblado de forma rústica procediendo a encenderlo.

La ventaja del pensamiento analítico y a la vez salvaje de Hanji le devolvía esperanzas al hombre de ojos grises azulados cuando el grupo de mocosos idiotas como él solía llamarlos en realidad sí resultaron ser una carta a favor como su esposa lo había predicho hace un tiempo atrás y tal cual ella le pidió a Levi con sus enormes ojos miel un poco de fe ciega en esos chicos al parecer no estaba demás, pues ese era el momento adecuado para cumplir con la promesa que en algún momento él hizo de mala gana a su preciosa pero caótica mujer; sin más preámbulos Levi accedió sin que nadie más dijera nada incluso Kenny como Erwin se limitaron a observar con destreza, después de todo se sobre entendía que era un momento delicado y por ende esto debía recaer en gran parte de las decisiones del joven Ackerman quien rápidamente había recuperado su postura gélida y calculadora que tanto lo distinguía.

Sin embargo aún preparado para encontrarse con el peor de los escenarios ya expuestos por Traute ni él mismo podía tener un aire calmo, sabía con claridad lo que le esperaba en pocos minutos, el caos, la pérdida y el riesgo fatídico de que el dichoso aparatito de Armin construido con los demás mocosos dejara de funcionar en caso de que el enemigo notase la presencia del mismo, ahora aunque estaban bastante cerca del punto que Traute dio y por ende ya esperaba con su séquito de ejecutores había algo extraño y esa idea no se disiparía pero resultaba gratificante tanto para el rubio más joven como para el azabache, aunque ellos estaban a metros del auto abandonado la posición de Hanji no se hallaba ni cerca en relatividad al lugar del accidente, unos momentos más y llegaron al punto medio donde prácticamente era el comienzo de las pistas para encontrar a Masquerade.