Capitulo 3.- Soy hijo de Satanás, y qué?!

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Anteriormente en Dragon Ball Z... Digo digo en Kill no Exorcist!.

Rin después de huir de la casa donde lo salvaron se topó con un contrincante sumamente particular llevándolo al extremo y haciéndolo usar sus llamas para así seguir con su pelea.

Qué pasará con nuestro protagonista?, Acaso logrará librarse de está lo más ileso posible?, Por qué estoy narrando ésto como el narrador de Dragon Ball?.

Descubramoslo en éste capítulo.

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GRAAAAHHHH!!!

Ese fue el alarido que el nephilim había soltado al momento de encenderse en llamas, era una imagen sumamente perturbadora para cualquier persona con una voluntad débil, pero para Uzu Sanageyama significaba muchas cosas siendo una de ellas la más importante.

Uzu: (Ésto se pondrá interesante) No pensé que serías la antorcha humana y pirata, cómo puedes hacer es...WOAH QUÉ CARAJOS?!!!.- Dijo tratando de sonar burlón al principio hasta que algo pasó.

Mientras el hablaba Okumura se había lanzado hacía el a cuatro patas como una animal salvaje a una velocidad aún más monstruosa que la suya, en lo que para todos había sido un simple parpadeó para Sanageyama significó haber recibido un zarpazo Ígneo en un costado de su armadura.

Rin: GRRAAAAAHHH!!!.- Gruñó como un animal salvaje volviendo a arremeter en contra del peliverde.

Uzu: Maldito, retrocede!.- Dijo levantando su mano derecha y cargando otro ataque.

Pero en ese momento algo inesperado sucedió, cuando las 5 Kendos iban a golpear a Rin esté con un solo coletazo (osea un putazo con la cola) había cortado e incinerado todas las espadas en esa mano volviendo a gruñirle con odió, aunque para su suerte y mala suerte del peliverde una de esas espadas de bambú sobrevivió siendo tomada por el endemoniado nephilim.

Ambos cruzaron miradas viéndose fijamente a los ojos en el momento donde Okumura volvió a desaparecer en un estallido de llamas zafiro //porque, llamas carmesí = Fuego azúl = Los zafiros son azules = Ay ustedes ya lo entendieron// y usando la espada en sus manos empezó una frenética batalla de espadachines.

Los ataques de Sanageyama eran rápidos al igual que los de Rin, moviéndose a gran velocidad a través de esa zona residencial mucho fuego y fragmentos de kendos volaban por doquier en una demostración de violencia pura digna de un libro de masacres, Cada golpe que daban o recibían lastimaban a su contrincante de una u otra forma detalle que para Sanageyama era difícil de comprender pues con cada corte pedazos de su armadura salían volando y se incineraban aún más rápido de lo que volaban.

Su uniforme estaba diseñado para resistir cualquier cosa no es así?, Entonces cómo era posible que un fuego como el de su rival pudiera estar desmantelando su Blade Regalia sin ninguna clase de esfuerzo?, La respuesta es simple.

El fuego normal quizás no le afecte, pero el estába siendo uno de los primeros testigos del poder extraído del mismísimo infierno, las llamas de Satanás que eran capaces de quemar hasta el metal más bendito del mundo no tenían la más mínima dificultad en cortar, aporrear y machacar su uniforme de tres estrellas.

Esté hecho le dió al peliblanco la ventaja en cuestión de minutos, con sus ataques tan frenéticos y rápidos golpeando a Uzu era cuestión de tiempo para que su armadura cediera ante el poder del hijo de satán.

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⏰ Última actualización: May 23, 2023 ⏰

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