Lily Evans paso la mayor parte de su infancia tranquila, o al menos lo más tranquila que se pueda siendo una bruja en un mundo muggle; una carta en su cumpleaños número once marco su vida invitándola a iniciar una nueva etapa en un mundo completamen...
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El pelinegro camino por los pasillos del castillo en busca de su hermano, su madre había enviado una carta esa tarde y también un ultimátum para el mayor
Los merodeadores se encontraban en el pasillo del cuarto piso, planeando posiblemente su siguiente broma
Regulus camino hacia ellos; Sirius permanecía de pie recargado en la pared, a diferencia de Remus, Peter y Alex, él mantenía un cigarrillo entre sus dedos
- ¿Tu novia sabe que fumas? - pregunto de mala gana mientras el ojigris rodaba los ojos
- Muy gracioso Reggie - ironizo - ¿Qué quieres?
El Slytherin menor estuvo a punto de responder pero la mirada de Alex lo silencio de inmediato
- Mamá dice que si no le escribes vendrá ella misma a buscarte - sentenció - y dudo que quiera ver que tipo de amigos frecuentas - miro con desagrado a los leones
- Regulus - regaño el Rowl colocándose junto a él - ya hemos hablado de esto
- Alex - se molesto al ser reprimido
- Nada de Alex, mejor vayamos a la sala común, te ayudaré con tu tarea de transformaciones - dictó - los veo luego chicos
Ambas serpientes emprendieron camino hacia las mazmorras, con la mirada de los Gryffindor detrás de ellos
Sirius miro con desagrado al Rowl, odiaba como él se había ganado el afecto de su hermano y sobre todo como este parecía no molestarse al recibir órdenes de su parte
- Si las miradas matarán Alex estaría muerto - musito James palmeando el pecho de su amigo y comenzando a avanzar
- ¿Por qué te molesta tanto? - pregunto con curiosidad Lupin - deberías estar agradecido de que Regulus tenga una buena influencia
Sirius se mantuvo en silencio y siguió con su camino sin prestar atención a las conversaciones de los chicos
En cuanto la cabellera rubia de la Black se hizo presente el pelinegro corrió hacia ella
- ¿Cómo está la mejor prima del mundo? - pregunto con una sonrisa
- Preocupada por lo que me pedirlas ahora - murmuró Narcissa de mala gana
El león rodó los ojos y la rodeo por los hombros dando vuelta en el pasillo
- Mi madre me ha escrito otra vez - sonrió - quería ver si mi querida prima y la sobrina preferida de Walburga me ayudaría a pedirle que me deje en paz
