Things I need to hide

Do it

Le di vueltas a mi celular un par de minutos más, pensando en qué podría pasar.
Uno: Chris no contestaría. Dos: contesta y me trata como un desconocido. Tres: me contesta, me trata como un amigo y tendremos unos cuantos momentos incómodos. O cuatro: me contesta y me trata como lo que de verdad somos, o solíamos ser: una parte del otro.
Mia entra al cuarto con una taza de café y después me observa desde el sillón en el que está ahora.
- Luces como un tonto, Dare,- una sonrisa fugaz corrió por su boca.- Sólo llámalo.
- Pero que tal si...
-No me importa. ¡Hazlo!- le sonreí a mi amiga, sabiendo que ella entendía.
Y marqué el número.