Cap - 6

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Hoy era lunes un día más para ir a el colegio.

Tenía un mal presentimiento, por eso no quería ir al colegio pero mi mamá no me dejó faltar.

- Mamá porfavor, solo hoy sí - dije en puchero.

- No mi amor, no te puedo dejar faltar, tienes que estudiar para ser alguien en la vida -dijo sonriente.

- Bueno, está bien - dije para después hacer una sonrisa tímida.

- Me voy a trabajar, cuídate y llega temprano, chao. - Me dió un beso en la frente.

Mi mamá la quiero mucho, es lo más preciado que tengo y no me gusta llevarle la contraria. Talvez no me tenía que dejar llevar por mis emociones pero a veces es muy difícil controlar lo que sientes y más si es miedo y terror a qué te pase algo, cuando no sabes lo que te prepara el futuro.

Lo que ella no sabía esque le esperaba una gran sorpresa no muy agradable.

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Llegando al colegio todos los de mi salón me miraban y se reían de mí,  lo normal decía yo haci que no le preste mucha atención. GRAN ERROR.

Cuando iba entrando al salón escuche, hay viene. No gire porque pudo a ver sido un profesor después me iba llamar la atención.

De repente bolas de papel, comida y tomates empezaron a caerme encima.

Todos se reían de mí, me quedé estática y en eso se me acercó Nuria.

- Te dije que te ibas a arrepentir de lo que me hiciste - dijo con una sonrisa.

Y me tiró harina revuelto con huevo. Solo faltaba que me echaran agua de charco o peor aún lodo.

Salí de ahí corriendo, me tropecé con la profesora.

- Carol que te pasó - me dijo con un tono de preocupación.

- Nada - Dije y solo corrí

Lo que menos quería ahora era un interrogatorio.

Me quería ir a mi casa y no salir de mi cuarto, iba tan metida en mis pensamientos, que lo que menos quería era hablar ahora solo quería desaparecer del planeta.

- Caro, Caro ,Caro, espérame - dijo agitado, agarrándome del brazo.

Cuando ví a Agus solo lo abrace y empecé a llorar aún más en su pecho, preguntándome a mi misma que por qué me pasaban esas cosas a mi, porque yo.

- ¿Quieres hablar?- pregunto preocupado.

Yo solo negué con la cabeza, no podía y no quería hablar aún.

-  ¿Quieres que te lleve a tu casa? - preguntó más tranquilo.

Solo asentí, me aleje un poco de él, lo mire a los ojos y veía claramente preocupación, aunque quería decirle algo no me salían las palabras seguía en shock, me sentía frustrada con miedo un montón de sentimientos que podía expresar y lo volví a abrazar, le di mi dirección con dificultades y nos subimos en un taxi.

Cuando llegamos a mi casa, me fui a mi cuarto a cambiarme y Agus quedó en la sala.

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Iba entrando a la sala y lo escuche hablando por teléfono enfadado y cuando me vió se despidió y cortó la llamada.

- Caro - se acercó a mi y me abrazo como nunca.

- Caro, perdóname por no haber estado hay para protegerte, te hice una promesa y no cumplí, perdóname. - lo único que hice fue abrazarlo y me pegue más a su cuerpo.

- No tengo nada que perdonarte, tú no hiciste nada malo fueron ellos - le dije alejándome de él y viéndole a los ojos.

- Antes yo tengo que agradecerte por estar este momento conmigo, dándome tu apoyo, la palabra gracias es muy pequeña con lo que te quiero decir, de verdad un millón Gracias. - le dije y una lágrima en mi rostro cayó

Se acercó a mí y me limpio las lágrimas y yo ante ese tacto solo cerré mis ojos dejándome sentir esa seguridad que tanto me deseaba en este momento.

- Puedo darte un beso - me dijo y yo solo asentí.

Se empezó a acercar de nuevo a mí, puso detrás de mi oreja el cabello que tenía en la cara.

Me empezó a sonar mis mejillas, yo solo me deje llevar por la situación y cerré los ojos.

Sentí como nuestras respiraciones chocaban y como nuestros labios rozaban, hasta que me besó, fue dulce, lindo y tierno, había tenido mi primer beso. Por un momento la tristeza que sentía fue desapareciendo, me sentía feliz, emocionada, un millón de emociones juntas.

Nos separamos y sonreímos y nos dimos un abrazo del que no quería jamás dejar.

- Gracias - fue lo dije con mis mejillas sonrojadas

- ¿Porque? - pregunto

- Por hacerme sentir segura de mi misma, por cuidarme, por protegerme, por todo, Gracias - dije

- Te quiero mucho y no sabes cuánto me importas en este poco tiempo que te conozco - dijo sonriente con sus mejillas sonrojadas.

- Yo también te quiero mucho - le dije y le dí un beso corto pero dulce y lo abracé.

Se tuvo que ir porque tenía muchas cosas que hacer decía el.

Nos despedimos con un tierno beso y yo me quede felíz, emociones, un millón de emociones que antes no había sentido, parecía un sueño del cuál no quería despertar.
Cómo de un día horrible, nefasto termino siendo el día más felíz de mi vida.

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Chau 💜
~♡Alexa♡~

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