Origen "Magia y Sangre"

Capítulo 4

- Hay algo que queráis contarme –los dos se miraron, parecía que se comunicaban sin abrir la boca, el primero en abrir la puerta fue Cameron.

- Bueno, voy a hacer unos trabajos que tengo pendientes para mañana.

- Qué razón tienes, yo también tengo mucho que hacer –me levanté corriendo y me coloqué delante de ellos.

- De eso nada, de aquí no os vais sin explicarme que tiene mi madre que ver con la realeza – mi primo suspiró y se sentó en mi cama.

- Nadie puede saber que te lo hemos contado.

- Prometido.

- ¿Qué sabes exactamente? –encogí los hombros.

- Nada, solo que mi madre es vampiro y mi padre brujo, ¡ah! que también sois hombres lobo –Cameron negaba con la cabeza.

- La que nos espera, Blair explícaselo tú se te da mejor que a mí.

Justo en ese momento mi tía me llamó para que bajara, mis primos suspiraron de alivio, pero me salió una sonrisa ladina.

- No creáis que os habéis librado, después de cenar en mi habitación, intentaré sonsacarle información a vuestra madre, luego os cuento.

Cuando llegué a la cocina mi tía estaba liada con un guiso, había comida para un regimiento, movía las caderas al ritmo de una canción que sonaba en el salón, tenía buenos recuerdos con ella, siempre había sido muy cariñosa conmigo.

Aunque me gustaba estar con ellos echaba mucho de menos a mis padres, un nudo se me puso en la garganta, no sabía que pasaba, solo esperaba que todo se solucionara pronto para poder estar de nuevo con ellos, respiré hondo un par de veces y forcé una sonrisa.

- Me llamabas tía Helen –ella se giró con la sonrisa que la caracterizaba.

- Si cariño, ven ayúdame, sé que te gusta cocinar con tú padre –al nombrármelo el nudo volvió a mi garganta.

- Si, nos encanta cocinar juntos, a mamá no se le da bien, ella en cambio baila de maravilla.

- Sé que los echas mucho de menos –asentí con la cabeza.

- Tía Helen ¿puedo hacerte una pregunta?

- Dime cariño.

- Solo os conozco a vosotros ¿No tengo más familia? –su cuerpo se tensó al momento.

- Verás, tienes un abuelo, solo puedo decirte que no aceptaba el matrimonio de tus padres.

- ¿Y a mí tampoco me aceptaba? ¿Por eso no lo he conocido nunca?

- No cariño, tú abuelo no te rechazaba, pero es algo que no me corresponde contestarte, cuando vuelvan ellos te lo contarán todo.

- Y por parte vuestra ¿tengo abuelos?

- No mi niña, mis padres murieron hace mucho tiempo, te conocieron cuando tú apenas andabas, eras una alegría para ellos, si quieres mañana buscaré los álbumes de fotos y así puedo mostrártelos.

- Me encantaría.

La tarde con mi tía fue amena y entretenida, me enteré que mi tío era el beta de la manada, se ve que es un cargo muy importante y mi primo se estaba entrenando para ser el futuro beta, él estaba muy orgulloso de eso, también me explicaron que los hombres lobo tienen su pareja predestinada llamada mate y los vampiros tenían su alma, mi padre era el alma de mi madre y desde que se vieron no podían separarse, eso me gustaba, poder tener a alguien destinado para ti que te ame y al que tú ames incondicionalmente.

Cuando mi tío llegó cenamos, resulta que tanta comida era para ellos porque los licántropos necesitaban mucha cantidad de comida y proteínas ya que la desgastaban en el entrenamiento.