last will. 𝘀𝗼𝗼𝗴𝘆𝘂

capítulo quince

— ¡binnie! — sus ojos se posaron inmediatamente sobre él cuando le vio sentado en una mesa al fondo. verlo sonreír tan vivamente siempre le alegraba.

— ¿...qué? ¿qué te pasó? — ni siquiera se dio el lujo de saludarle cuando la primera cosa que captó su atención fue un yeso en su brazo que era sostenido por un soporte detrás de su cabeza.

— ¿oh? ah, esto. uhm... ese chico...— comenzó a explicar, jugando con el pequeño empaque de azúcar vacío que usó para su té. — el de antes, dijo que quería verme; y, cuando fui a verlo, él y sus amigos me arrastraron por ahí... fue entonces cuando se rompió, creo.

soobin apretó su mano sobre el espaldar de la butaca.

» ¡incluso robaron mi billetera! — rió. — pero sólo tenía como... quinientos wons, y fue como... "bueno, está bien".

el mayor no podía entender cómo se veía tan tranquilo, porque nada de lo que le contaba estaba bien.

— es raro, ¿no te parece? — beomgyu continuó, sus ojos mirando despreocupadamente su taza humeante de té verde. — la vida es como... muy rara.

él apenas abrió la boca para decir algo cuando la mesera llegó con la orden que el castaño había pedido al llegar. beomgyu se mostró muy feliz al ver su comida y le agradeció con cortesía a la chica.

soobin estampó sus manos contra la mesa, atrayendo la atención de ambos.

— ¡¿por qué fuiste a ver a ese chico?! ¿no era obvio lo que pasaría? — tanto beomgyu como la mesera, e incluso algunos clientes cercanos, se quedaron perplejos por su reacción. — ¡él pudo haberte matado! ¡¿estás mal de la cabeza o qué...?!

— tienes razón. estoy mal de la cabeza.

la forma abrupta en la que lo interrumpió, hablándole con suavidad y calma, le confundió. no sabía qué decirle, afortunadamente beomgyu continuó.

» "es tu culpa que te pase esto"; lo he escuchado antes... me golpearon porque hice algo para provocarlos...

— beomgyu...

— me golpearon porque fui desobediente — aunque lo deseaba, él no se detendría, ni siquiera parecía haberle escuchado. —, me asaltaron porque los tenté, yo busco mi propia suerte. estoy muy mal y... ya no sé por dónde comenzar para poder arreglarlo.

de repente, soobin se sintió mal. no se supone que él pensara eso de sí mismo, nada de lo que le pasaba era su culpa. beomgyu no había hecho nada malo además de nacer con un padre que no debía ser padre.

sonrió.

» pero, ¿sabes algo? de lo único que me alegro... es de que sigas conmigo. de que te preocupes y te enojes por mí. — levantó la mirada hacia el pelinegro. — lo siento... ¿estás enojado? ¿...binnie?