"¿Puedo obtener tu número?"

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Pov Omnisciente:

Una mañana más en la hermosa cafetería que siempre se encontraba llena de gente variada, desde personas mayores conversando, trabajadores de oficina, hasta estudiantes realizando sus tareas mientras tomaban un delicioso café que llenaba de calidez su interior.

Era el lugar perfecto para liberar el estrés que una persona puede llevar sobre si, y aquel lugar irradiaba la paz que las personas necesitan en esos momentos, era el aura del lugar o tal vez la amabilidad de las personas que los atendían, Seonghwa en especial amaba ayudar a las personas, era algo que le llenaba y aunque se esmeraba por trasmitir esa tranquilidad a cada cliente que atendía había en especial una persona con la que se esmeraba aún más en provocar aquella sensación para darle una razón más de volver para poder mirarla y tal vez cruzar un par de palabras antes de que tuviera que volver a irse.

Aquella persona tan especial que hace un par de meses conoció y que comenzó a ir unos días a la semana solo para darle una motivación de seguir llendo a trabajar e iluminar su día por completo, aquella persona a la que nunca había tenido el valor de acercarse más que solo para preguntar que iba a querer probar ese día, pero estaba decidido a cambiarlo, desde el primer momento que la vio supo que quería hacer más que solo mirar de lejos y soñar despierto con cómo sería estar sentado a su lado, tomando su mano, conversando por horas y regalándole algunos suaves besos entre palabras.

Nuevamente como cada día se encontraba atendiendo con completa amabilidad a cada persona que ingresaba; con un rostro sereno y un gesto de total tranquilidad cuando por dentro estaba ansioso de ver a aquella persona ingresar por la puerta una vez más, que se acercara a hablarle con esa dulce voz y lo mirara dos segundos antes de ir a tomar asiento a su lugar habitual en aquella mesa junto a la ventana.

Solo un par de minutos y su deseo fue cumplido, viendo entrar a esa bella chica de cabello castaño largo ondulado, de ojos grandes que moría porque lo mirarán de la misma forma que él lo hacía. Ella entró y se acercó como siempre al mostrador solo que está vez no llevaba su típica sonrisa suave en el rostro y no irradiaba la misma luz que Seonghwa siempre notaba en ella...

Seonghwa: Buen día -Saludó a la chica un poco preocupado por la apariencia que tenía-

X: Buen día... -Soltó un pequeño suspiro mientras levantaba la vista hacia el chico detrás del mostrador-

Seonghwa: ¿Qué puedo ofrecerte el día de hoy? -Continuó mirándola queriendo preguntar cómo se encontraba-

X: ... -Guardó silencio un momento y luego habló- En realidad no se... quería estar en un lugar tranquilo y pensé que este sería el lugar perfecto...

Seonghwa: -No pudiendo guardarselo más se animó a preguntarle- Disculpa que te pregunté pero, ¿te encuentras bien?, luces un poco desanimada...

X: Lo sé ¿verdad?, anoche no pude dormir casi nada debido a que tuve que estudiar y me siento bastante cansada... -Expresó con sinceridad, sintiéndose con la confianza de contárselo-

Seonghwa: -Asintió al escuchar sus palabras y en un momento su cabeza hizo clic- Creo que se exactamente que te puede ayudar.

X: ¿Ah si? Entonces iré a sentarme mientras está listo -dijo regalándole una pequeña sonrisa-

Sin perder más el tiempo fue hacia el almacén sacando las cosas necesarias para preparar aquella bebida que no venía en el menú pero haría especialmente para está ocasión porque sabía que le ayudaría a sentirse mejor.

One shots (Park Seonghwa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora