Capitulo n°3:"Malas impresiones"

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De repente....mi sueño más bien se convirtió en un recuerdo cuando tenía 11 años y vine a visitar a mi madrina...estaba con una amiga y fuimos al patio trasero del internado, un gigante patio que estábamos jugando a las escondidas cuando mi madrina llamó diciendo que jugáramos con un niño que estaba solo, y eran vacaciones de verano nadie.... casi nadie estaba en el instituto de al lado del padre Timotheo, el paso a saludar a Concepción su hermana y a mis padres y con él vino el niño y otros 3 mas "pequeños"que nosotros. Los niños más pequeños jugaban con Valentina, mientras que Esteban jugaba con nosotras, el dijo que jugáramos a las escondidas yo iba a contar me tape los ojos y antes de que diga que termine de contar, escuché el ruido de unas tijeras, y ¡CRASH! Esteban reía no entendía el porque.

Doy media vuelta y lo veo con la tijera y mi pelo (no me corto todo el pelo pero yo tenía una cola de caballo muy bajita que se me caía y el muy desgraciado tenía su pelo con el elástico que la sostenía), estaba furiosa, no lo conocía y el hizo eso. Me habían sujetado de los brazos, porque sin duda me lanzaría a el y no dejaría rastro de mi homicidio.

Luego recordé los otros recuerdos tormentosos, pero eso es otra historia, es muy triste pero prefiero no tocar el tema de nuevo. Las lagrimas caían en mis mejillas, pero no les di importancia. Levante a Luciana que al parecer tenía el sueño ligero, balbuceo un -¿Qué pasa?- Nunca vi a una persona derramar tanta baba en la almohada, no la culpo ya también lo hago. Accidentalmente claro.

La miré a los ojos y le conté cuando eramos pequeñas y lo que había recordado... y le pregunté...
Yo: -¿Pero vos no dijiste que era tu mellizo?- Me asintió con la cabeza y me comento que el en su tiempo era un "monstruo en potencia" y una copia de "De Daniel el travieso" pero me dijo que no sabía la causa , pero cuando viera a su hermano se lo preguntaría y añadió;

Luciana: -Todos en algún momento pasamos por ser niños malos en nuestra infancia ¿oh no?-
Guliana:- Yo no- respondí medio enojada.-Pero si soy muy rencorosa en ciertas ocasiones, me voy a vengar- Ella con una sonrisa maliciosa me dijo que me apoyaría...encima el muy imbécil se me hacia el galancete, retiro lo dicho jamás va hacer lindo lo importante es lo de adentro y al no le importo hacerme eso, muchos pensaran que sembrar rencor es malo y lo es, pero sufrí tanto por personas a las que nunca pude defenderme, que por las cosas mas pequeñas trato de hacer justicia.

Luciana: - Bueno, mañana lo seguimos discutiendo Guliana vamos a dormir ¡Sueña con los angelitos, osea conmigo!- Mi rubia simpática dio unas leves risas y a los 5 minutos aproximadamente escuche sus ronquidos. Creo que China también los escucho.

No dormí mucho, ya que estuve planeando mi venganza a Esteban, ese idiota me las pagaría y tal vez probablemente me la devuelva pero no me rendiré, tratare de demostrarle que no seré una muñeca que el puede controlar, soy fuerte y no la daré la ventaja de alguna vez de verme sufrir.

Al otro día me levanté de la cama, me costó lograr conciliar el sueño pero lo hice. Déjenme añadir que es una lucha hacerlo todas las mañanas, Valentina lamentablemente es testigo de esto ya que recibió almohadazos, despertadores y todo lo que este cerca mio. Soy una Bad Girl amigos, mentira a penas salgo a la esquina de mi casa y lo cerca a una moto que tengo es una bicicleta color rosa.

Mis padres ya no estaban y mi madre me había dejado un mensaje, pero mi celular tenía 3% de batería por lo tanto espere a que se cargara. Mientras ocurría esto me lave los dientes y mi cuerpo, lo sequé junto con mi pelo y me coloque mi atuendo. ¡Estoy lista!

Fui a la cafetería del instituto y percibí en una de las tantas mesas del comedor que Luciana, Martina y Juana me sonreían y me llamaban para que me sentase con ellas, les devolví la cálida sonrisa y antes elegí un té y una rebanada de torta de chocolate , me dirigí hacia ellas, me senté y observé que había más chicas que ayer.

Nuestra relación. Atte: Una chica enamoradaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora