Estamos uno frente al otro fingiendo cordialidad, fingiendo que todo está bien hablamos y nos reímos como alguna vez cuando de verdad nos quisimos.Nos despedimos con una sonrisa tan falsa como nuestro intento de llevarnos bien otra vez , pero cuando ya no me ves pero cuando ya no te veo se que nuestro desprecio se hace presente a lo lejos lo siento lo sientes, y aunque somos conscientes del desdén que sentimos el uno por el otro seguimos fingiendo .
Guardamos la compostura frente a los demás con un saludo a lo lejos una sonrisa fingida y un intento por convivir que nos hace caer en las garras de la hipocresía Un laberinto sin fin basado en fingir .
Se que hay desprecio por mí en tu corazón, quizás odio, olvidaste todo lo que hice por ti, todo el amor y cariño que sentí el cual terminaste por enterrar con tus malos tratos y tus desprecios e indiferencia para conmigo.
Y después de habernos querido tanto pasamos ser enemigos, en un círculo sin fin de hacernos daño.
Nunca descubrí la razón de tu desprecio hacia mí, nunca te hice daño, aunque a si te lo hicieron ver y terminaste por caer en la manipulación de una mujer, ella te hizo creer que yo era la razón de tus desgracias y de todo lo malo que pasaba en tu vida, terminaste odiándome .
Me hiciste tanto daño que te saliste de mi corazón, y aunque intente volver a quererte, tú ya no eres el mismo veo en tu mirada la oscuridad dentro de ti, aquella que un día fue luz, y sé que perdonar no será suficiente, aunque lo intentemos terminamos volviendo a despreciarnos a despotricar sobre el otro.
Quizás lo mejor sea alejarnos mientras aún nos queda un poco de cordialidad.
Hay heridas que ni el tiempo ni el perdón pueden curar.