Una Historia Diferente 2

Cap 9

Zak iba al frente de nosotros, se veía mal, cómo... Molesto y preocupado.

-¿Que fue lo que sucedió durante el entrenamiento para tener a Zak de tan mal humor?

-No lo sabemos bien... -Antes de que Cloe siguiera, Lon la interrumpió

-Es por su maldito afán de protagonismo.

-Vamos, no podemos dejar que Sidmodius escape- dijo Zak.

Avanzamos hasta una roca que direccionaba en dos caminos, Zak y Lon fueron por un lado, y el resto por el otro.

En el camino, encontramos Yakis, pero no estaban con Sidmodius. Nos apresuramos a llegar con los chicos, pero al hacerlo, ambos estaban en el suelo, Zak estaba de rodillas, mientras Lon estaba semidesmayado.

-¡Lon! -Cloe se acercó con rapidez a él, mientras yo me acercaba a Zak para ver cómo estaba

-¿Que fue lo que ocurrió?- Decidí preguntar

-Sidmodius escapó -Dijo Lon, ya volviendo en sí.

Al ir de regreso, Lon contó lo que había pasado. Yo solo me quedé callada, prefería no hablar, después de todo, no tenía nada para decir.

Llegamos con Danima, y está se encontraba reposada en un tipo de cama. Al irnos, ni siquiera había acudido a verla, pero ahora... Viéndola... Me doy cuenta del por qué todos estaban tan preocupados por su salud.

Al entrar, Kido nos vio con preocupación.

-¿Cómo les fue?

-Sidmodius escapó, pero, aún debe de haber otra manera, algo que podamos hacer -Dijo Zak

-Olvidense de mí, la misión es lo importante -Comentó Danima.

-Al diablo con la Misión, no vamos a permitir que mueras -Zak se arrodilló frente a ella, sosteniendo sus manos.

-En ese caso, quizás quedé una última opción. Deben ir al volcán de roca Nero y encontrar a los amos del fuego. Son los más poderosos de Masara, los cuales custodian las piedras Nero, capaces de salvar vidas.

-Iremos. -Puse mi mano sobre el hombro de Zak.

-Chicos, vámonos.

Viajamos hasta llegar a un volcán de aspecto imponente, era en su mayoría rojo y negro. Comenzamos a subir, Zak iba al frente, detrás de él iban Lon y Cloe, los cuales al parecer venían riendo, les seguía Kiet y Fenzy, y al final Kaz y yo.

-No es momento para las risas. -Dijo Zak enfadado. -Tenemos que volver con Danima pronto.

-Danima no estaría en peligro si tú no hubieras dejado escapar a Sidmodius. -Lon arremetió contra él.

-¡Tu también habrías podido detenerlo!

-¡Basta!- Me acerque a ambos separandolos. -Son tan infantiles e inmaduros. Lo que pasó, está en el pasado, ya no podemos hacer nada. Y en esto estoy de acuerdo con Zak, no es momento para las risas. -Sin importarme el resto, seguí caminando con prisa a la cima.

Me sentía ansiosa. Llegamos a un punto plano, dónde habían estatuas.

-Mi nombre es Marmus, amo del fuego y ella es Oxidia- Hablo una de las estatuas, abriendo los ojos, dando a ver un color blanco en ellos -¿A qué han venido?

-Hemos venido por una roca Nero. -Una vez termino de hablar Zak, las rocas comenzaron a levantarse de dónde parecían estar sentadas, dando un aspecto intimidante, ya que eran considerablemente mucho mas altas que nosotros.

-Una roca Nero es una gran responsabilidad, solo se las daremos si nos derrotan a un Sendokai.

-Lo haremos-.

El Sendokai comenzó, ambos senroks estaban en rojo. Al comienzo, Cloe utilizo el destello nu-sen, tomando el balón, para mandarlo directo con Lon. Este disparo, pero uno de los amos lanzo una roca en su dirección, evitando que llegara al Senrok. KazKrad y yo corrimos hasta tomar el dö, con nuestro sen conectado, hicimos el Lumox duo-sen, anotando así el primer Kai.

Zak y Lon estaban listos para hacer la fuerza duo-sen, pero al último momento, Zak no lo hizo, provocando que el otro equipo la hiciera, marcando un Kai.

-Zak, necesitamos la fuerza Duo-Sen -Comente

-Pero, Lon y yo no estamos compenetrados.

-¿Es por eso? ¿Por orgullo? No podemos darnos por vencidos, no podemos dejar que Danima muera- Dijo Cloe con un rostro afligido

-Tienes razón. Lon, tenemos que hacerlo, por Danima.

Acercaron los brazaletes al pecho del otro, logrando sacar la fuerza duo-sen, sin embargo, los amos del fuego hicieron algo que no había visto, lo llamaron Fusión Nero-Sen, lo cual logro  derribar la fuerza duo-sen de Zak y Lon, y romper el muro duo-sen de Fenzy y Kiet, marcando así el último Kai.

El amo de fuego se acercó a Zak, sacando así una roca Nero del centro de su estómago, acercándola a Zak.

-La roca Nero es suya.

-Pero perdimos -Dijo Zak, a lo cual me acerque un poco para golpearlo, pero KazKrad me detuvo.

-Dejaron de lado el orgullo, para hacer lo correcto, merecen tenerla.

-Muchas gracias.

Nos dirigimos corriendo a los deslizadores, durante el camino, no pude evitar indagar un poco en mis pensamientos, y decidí hablar con KazKrad

-Oye, Kaz... Tú... ¿Crees que Danima nos mintió?

-¿De que hablas?

-Los amos del fuego, hicieron una fusión extraña, tengo la sospecha de que la roca Nero no es lo que nos dijo Danima. -Sin decir más, repose mi mejilla en su espalda, abrazándolo con mis brazos el resto del viaje.

Llegamos con Danima, felices y con esperanza.

-Danima, tenemos la roca Nero. -Zak fue el primero en acercarse con la roca en sus manos.

-Sabía que lo lograrían. -Tomo la roca y dijo- Nero-At-Sen. -Una luz comenzó a irradiar la roca, y mis sospechas fueron respondidas, si era lo que creía. -Acerquen los brazaletes.

Terminamos cambiando armaduras a unas negras, que parecían tener un tipo de caja en la parte de la espalda.

-Son armaduras Nero, aumentará sus poderes un nivel y les permitirá realizar un nuevo poder

-La fusión Nero-Sen -Murmure afligida.

-Una vez que todos estén compenetrados la podrán hacer.

-No lo entiendo, ¿Cómo podrán estás armaduras salvarte?

-Con ellas derrotaran a Sidmodius, y salvarán muchas vidas, pero no la mía. -Todos soltaron una exclamación ante esto- Tranquilos, mi Sen volverá a reunirse con Masara, de alguna forma, siempre estaré con ustedes. Zak, cargar con el mapa, es una gran responsabilidad, y se que harás lo mejor para el equipo, aunque no sea lo mejor para ti, esa es tu verdadera misión, porque eso es lo que hace un verdadero Hakuru.

-Pero, no sé cómo acerlo.

-Nadie sabe hasta que lo aprende. -Sin decir más, sus ojos se cerraron.

El cuerpo de Danima comenzó a elevarse, dejando a relucir destellos verdes, deshaciendo su cuerpo, generando oleadas de Sen que recorrieron toda Masara.

Sin poder evitarlo comencé a llorar. KazKrad me abrazó. No me gustaba nada este sentimiento, cada vez se hacía más fuerte. El miedo, la preocupación, todo era tan latiente, que ya no iba a poder aguantar mucho más. Me separé de KazKrad y comencé a alejarme al portal, este quiso acercarse pero lo detuve.

-Quiero estar sola.

Sin esperarlo más, fui a casa. Al llegar solo recuerdo mi cuerpo caer, mi llanto no dejaba de salir. Duró así hasta que ví todo negro.

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Ajas, la última vez que publique dije que ya no lo iba a dejar tanto tiempo abandonado, y heme aquí. Sorry, sinceramente si se me olvidó que tenía escribiendo esta historia, pero ya, lo prometo, estás vacaciones voy a escribir está historia sin falta, no sé cada cuánto la actualice, pero esperemos sea pronto, y con más frecuencia.

Bais