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Mac: sí, por supuesto – se levantó mirándola – hoy podemos trabajar un poco más en tu coordinación ¿te parece?

Wanda: claro, ¿Cómo vamos a hacer eso?

Mac: bueno, tenía pensando arrojarte eso – le señalo un recipiente lleno de pelotas de plástico – tienes que pararlas con tus poderes ¿sí?

Wanda: está bien – asintió mirándola – anoche estuve practicando un poco más mi respiración como me dijiste para controlar mis emociones

Mac: eso es bueno – asintió con una sonrisa – va a ser de mucha utilidad ahora mismo

Wanda: es bueno saberlo – se preparó - ¿empezamos?

Se miraron antes de que Mac comenzara a arrojarle las pelotas de plástico mientras que Wanda las atrapaba con sus poderes manteniendo calmada su respiración, estuvieron entrenando por un par de horas hasta que de un momento a otro la sokoviana le devolvió una de estas dándole en la frente a Mac que estaba un poco desconcentrada por lo hermosa que le parecía la chica.

Wanda: oh dios mío – se llevó las manos a la boca intentando no reírse – perdón

Mac: oh eso fue increíble – se rio mirándola – no estaba concentrada ni coordinando

Wanda: sí, deberías descansar – la miró acercándose para limpiar su frente donde le había golpeado la pelota – se corrió la bandita que tenías

Mac: oh – tocó la herida de su frente – luego lo arreglo, no te preocupes

Wanda: ¿Cuándo volvemos a combatir con poderes? – la miró con una sonrisa

Mac: bueno mi idea era hacerlo hoy – la miró mientras se limpiaban con una toalla el sudor – pero cómo sé que lo notaste mis emociones están un poco revolucionadas ahora mismo

Wanda: lo sentí – la miró – sólo que no quería preguntarlo en ese momento ¿quieres hablarlo?

Mac: es solo que detesto que intenten relacionarme con Stark – suspiró negando – hace años que deje de ser una, siempre fui Mac Barton

Wanda: no puedo imaginar lo difícil que es eso – tomó su mano – o lo que estás sintiendo

Mac: él jamás fue mi padre – bajó la mirada sintiendo que las lágrimas se acumulaban en sus ojos – no me cuido o se preocupó por mí, él renunció a ser mi padre e incluso me electrocuto haciendo que mi corazón se detuviera – negó molesta por eso – y no tuvo la decencia de, aunque sea preguntar cómo me encontraba en estas tres semanas

Wanda: Hey, te tengo – rodeo con sus brazos el cuello de la chica – puedes dejarlo salir printsessa, no voy a irme, estoy aquí contigo

Mac pasó sus brazos por la cintura de Wanda antes de esconder su rostro en el cuello de la chica mientras se permitía llorar, un llanto desgarrador cómo jamás se había permitido sentir, tantos años y tanto dolor guardado que finalmente estaba dejando salir, sin mencionar el sentimiento de que pudo haber muerto por una simple discusión en la que su corazón se había detenido. Ninguna se dio cuenta de que tanto Natasha como Steve estaban allí buscándolas, se encontraron frente a esa situación sintiendo el dolor en el llanto de Kenz, no podían entender cómo Stark podía ser tan idiota como para no haberse dado cuenta de todo el daño que le estuvo haciendo a la chica. Decidieron que lo mejor era no interrumpir el momento tan íntimo, por lo que salieron de allí dándoles privacidad, alegrándose un poco de que se tuvieran la una a la otra.

Wanda acariciaba con suavidad la espalda de la chica hasta que sintió que se tranquilizaba poco a poco, se separaron lentamente, limpió con delicadeza las lágrimas que aún caían por el rostro de Mac sonriéndole un poco, está volvió a abrazarla nuevamente sintiendo el perfume de la chica, el cual le resultaba demasiado relajante.

Scarlet StormDonde viven las historias. Descúbrelo ahora