Hola, mi nombre es (t/n) (t/a), soy una universitaria cursando su último año en la carrera de Historia, mi grupo tenía como actividad ir a la ciudad de Athenas a explorar y aprender sobre su historia y capturar fotos de las ruinas para después hace...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
⟨🌿⟩ pov (t/n):
Apolo presionó su espada queriendo enterrarla en el cuello de Eros pero la lanza de Ares lo detuvo, ambos se miraban con odio mientras que Eros contaba con su arco roto y tres flechas en su mano libre. Hestia, Demeter y Hera estaban sosteniendo a Afrodita evitando que cometiera asesinato hay mismo. Dionisio estaba abrazando mi cintura mientras que Athenea trataba de alejarlo de mí
Solo podía pensar en como llegue a estar envuelta en todo este lío. Todo paso hace unas horas atrás cuando Apolo y yo entrabamos en el templo de Zeus y Hera.
‹ Horas antes de lo ocurrido ›
Estaba tomando la mano de Apolo mientras nos adentramos en las grandes instalaciones del templo principal de los dioses.
Estaba nerviosa, no quería ver ni la sombra del padre de Apolo, solo rezó a qué Hera mantenga a raya a su esposo o al menos hasta que encuentre las gemas. Siento como Apolo rodeaba mi cintura con uno de sus brazos apegando me a el, el parecía molestó por lo que lleve mi vista al frente y observé a un chico.
Era bastante alto y delgado,de piel clara y ojos color vino, su pelo era marrón con reflejos vinotinto, tenía una toga fucsia tapando solo la mitad de su torso y contaba con un cintillo partido de muérdago en su coronilla. Por como sostenía una copa y se le dificultaba estar de pie no me fue muy difícil adivinar que se trataba del dios del vino, Dionisio.
Me aferre al cuerpo de Apolo puesto que Dionisio nos miraba, más bien, me miraba de forma coqueta y hasta morbosa, no soy estúpida, se muy bien como se ve y se siente que te miren así, desgraciadamente no pude evitar ser mirada así mientras salía a la calle ya sea con mis amigas o sola, está demás decir que odiaba ese tipo de miradas aparte que me incomodan demasiado.
-"okey, Dionisio tiene la primera red flag hasta el momento"- pensé
Seguimos caminando hasta encontrarnos con unas escaleras demasiado largas a mi parecer pero no había de otra.
-!!!- Apolo se detiene de repente
Yo me sorprendo un poco pero rápidamente fui jalada en dirección a una mujer peli negra con un arco.
- ¡Hermana! - soltó Apolo feliz sin separarme de él
Era Artemisa, ella era hermosa, su pelo negro el cual le llegaba hasta los hombros, sus ojos eran color miel y su cuerpo se veía muy bien formado, no me mal entiendan, era muy de notar sus musculosos brazos junto a su muy marcado abdomen, ¿eran 6?. Su ropa era un atuendo militar troyano dejando ver sus piernas que eran igual de musculosas que su cuerpo.
Estaba intimidada y mucho, tampoco ayudaba mucho que me estuviera juzgando con la mirada sin importarle siquiera disimular frente a su hermano.
