|| SHIKANOIN HEIZOU || 1 ||

429 16 0
                                    

Hormigueos por todas partes, nervios inexplicables, ligero temblor en las piernas, corazón acelerado, las conocidas 'mariposas en el estómago'...

—¡______!—llegó a paso acelerado hasta la nombrada—. Espera, podríamos quedar mañana para dar un paseo, ¿qué me dices?

—¿Un paseo? ¿Desde cuándo eres de paseos?

—¿Ves? Algo nuevo que sabes de mí, deberíamos conocernos más, al fin y al cabo trabajamos juntos desde hace casi un año y no sabemos nada del otro.

Tenía que investigar, sacar un resultado lo suficientemente contundente para él.

—¿Me estás pidiendo una cita?—arqueó una ceja con sospecha.

—Te estoy citando aquí, mañana por la tarde así que, sí, es una cita.

—Te encanta irte por las ramas, nunca eres claro cuando se trata de conversar.

—Pero yo no soy el que no deja de hacer preguntas y no responde las que le han hecho inicialmente.

Era difícil de tratar, seguramente más que el detective, pero él nunca se daba por vencido y ella en el fondo sabía que no podía resistirse ante el chico.

—Está bien—suspiró rendida—¿Al menos puedo saber el motivo?

—Quiero comprobar algo—dijo sin tapujos.

—Bien—aplaudió con una sonrisa claramente forzada—. Voy a servir de perro detective para Shikanoin Heizou—celebró sin entusiasmo.

—Oh, vamos. Prometo que será divertido y no dejaré que te aburras.

—Como tú digas, al fin y al cabo eres mi superior, Heizou.

Eso sonó demasiado bien para el detective de la Comisión Tenryou.

—¡Bien!—chasqueó los dedos—. Entonces nos vemos mañana.

Después de una pequeña despedida informal, la chica salió casi corriendo del lugar, llegando a casa y tirándose a la cama en cuanto puso un pie en su habitación.

Ahogó un grito en la almohada sin poder contener más su emoción. Heizou, su superior, el chico que le gusta, la había invitado a una cita.

A penas pudo pegar ojo, y a la mañana siguiente despertó tan temprano que le sobró tiempo para prepararse con calma y llegar casi una hora antes al sitio acordado. Y ahí estaba él, igual de ansioso, había madrugado con la esperanza de que no le dejaran plantado. Se encontraba apoyado en un árbol con los brazos cruzados, apartado de la gente que recorría las calles de Inazuma, pasando desapercibido y analizando cada persona dentro de su campo de visión.

—Vaya—suavizó la mirada en cuanto se cruzó con la suya, apartándose del árbol—. Me alegra saber que no soy el único emocionado con nuestra cita.

—Solo procuro ser lo suficientemente puntual para mi superior.

Si seguía siendo tan formal con él y tratándolo de su superior, definitivamente terminaría por explotar de la dicha. Así que, con esta sensación de alegría en su pecho, el plan del detective Heizou daba comienzo.

—_______—pronunció volviendo a cruzarse de brazos y con un semblante serio—. Esta tarde no soy tu superior—carcajeó—. Vamos, no me mires así. Solo céntrate en pasártelo bien mientras observo tus expresiones tan divertidas cuando te dejas consentir.

—¿Por qué lo dices de esa forma?—frunció el ceño con un pequeño puchero que logró ver el detective—. Ni que tuviéramos una relación tan estrecha como para hablar en este tipo de términos.

—¿Hm?—ladeó la cabeza, esbozando una amplia sonrisa—. ¿Y en qué tipo de términos estamos? Oh—rió levemente—. Piensas que me estoy insinuando. ¿Supone algún problema para tí?

Maldecías lo directo que era para algunas cosas. Heizou era alguien que le encantaba dar vueltas a todo tipo de asuntos, sobre todo cuando te encargaba descifrar las pistas de algún caso pero, para otras cosas, parecía que incluso le divertía molestarte y burlarse de tí.

—¡Sólo camina!—exigiste.

—Como tú digas—canturreó comenzando a caminar detrás de tí.

—Ven aquí—agitaste el vacío a tu lado derecho—. No vayas ahí como si fueras un perro.

—No me molestaría servirte de esa forma...

—¡Heizou!

—Bien, bien—asintió entre carcajadas—. Ya paro.

La tarde era agradable, de vez en cuando sentías una suave brisa acariciar tus mejillas y la disfrutabas con una sonrisa. Hacía mucho que no aprovechabas un fin de semana en condiciones, y Heizou te estaba dando esa gran oportunidad que agradecerías finalizada la cita.

Por otro lado, el detective analizaba cada acción que realizabas, la delicadeza con la que tratabas y hablabas a los demás cada vez que preguntabas por algún platillo interesante o unas telas que te llamaban la atención. Cuando acariciabas las telas y podía ver en el reflejo de tus ojos sus diversos colores, su corazón rebosaba de alegría.

Había veces en las que se tenía que obligar a poner los pies en la tierra, agitando su cabeza con disimulo para apartar la mirada de tí, borrando su sonrisa, aclarando su garganta y adoptando un semblante serio.

—Llevas con esa cara desde que vimos la última tienda—detuviste tu paso para mirarlo—. ¿Te estás aburriendo?

—¿Eh? No, no—agitó sus manos antes de cruzarse de brazos—. Fui yo el que insistió en ver lo que tú querías.

—Eso quiere decir que no te está gustando nada de lo que estamos viendo—ladeaste la cabeza—. ¿Por qué no hacemos algo juntos?

—Hm—ladeó una sonrisa—. ¿Qué propones? Recuerda que soy tu superior, ______, podemos divertirnos mucho.

—No dejas de decir ese tipo de cosas—frunciste el ceño—. En serio, ¿qué te pasa?

Sus ojos se abrieron a más no poder, el contacto físico de tus manos sobre sus mejillas era algo que no se esperaba en absoluto.

—_______...

Tu nombre se escapó de sus labios en un pequeño suspiro que te hizo dar un grito interno.

Vuestros ojos bailaban de arriba a abajo, deslizándose lentamente de la vista del otro hasta los labios del otro. Era un momento lleno de tensión en el que no podíais apartar vuestras miradas mientras acortabais la distancia entre vosotros.

—Ay—echaste tu cabeza hacia atrás al sentir una gota de agua caer en tu nariz.

Pronto comenzó a diluviar y no tuvisteis más opción que correr a tu casa ya que era la más cercana. Tomaste la mano de Heizou y aceleraste el paso, arrastrándolo contigo.

—¡Veo que no desaprovechas ninguna oportunidad!

—¡Heizou!

—Tranquila, no estoy molesto—rió—. Puedes secuestrarme todas las veces que quieras.

Este chico te volvería loca.

[] GENSHIN IMPACT [] ONE-SHOTS []Donde viven las historias. Descúbrelo ahora