•∆ 𝓟𝓻𝓸𝓵𝓸𝓰𝓸 ∆•

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Han pasado poco mas de 3 años desde la última vez había estado fuera de esté lugar, el campamento mestizo, llevaba 3 años viviendo en la cabaña de Hermes, aunque este no era mi padre, quiero decir desde que había ingresado al campamento mi padre no se había molestado ni un poco en Reclamarme como su hija. Por mi condición me han puesto varios apodos como: la huérfana, sin padre, acogida, semidiosa abandonada, invasora de la cabaña 11, protegida de Hermes o el menos doloroso, La no reclamada.

A lo largo de estos 3 años he visto a varios campistas ir y venir a esta cabaña, algunos de ellos eran tan malos que se burlaban de mi por ese hecho, pero lo cierto es que había logrado congeniar con los chicos de la cabaña 11, por lo que ellos me consideraron una hermana más, en especial por los Stoll, por lo general los tres nos metíamos en problemas y terminaba yo cargando con toda la culpa así que eso me llevo a ser muy unida A Luke aunque cabe destacar, que el me gusta... Y mucho.

Hablando de él...

Se puso frente a mi y cruzo sus brazos levantando levemente una ceja, curioso debido a que mis ojos, los cuales apostaría 4 dracmas a que eran de un azul muy vivo, o como él dice azul eléctrico, todo mi rostro mostraba una inmensa felicidad, la cual era imposible ocultar.

— ¿Me dirás o tendre que adivinar? —
— ¡Me han asignado a una misión! — dije emocionada

La cara de sorpresa de Luke era algo que jamás había visto antes, pase mi mano por enfrente de sus ojos y este me miro nuevamente y se dirigió a abrazarme.

— ¡Que asombroso! — dijo — ¿Cuando partes? — se separo de mi colocando sus manos en mis hombros
— Pues... — mire al piso evitando su mirada — Mañana temprano —
— ¿Es una broma? — dijo confundido y negué — ¡¿Qué?! —
— No te preocupes castillito — le enseñe la lengua — No estaré micho tiempo lejos en menos de 3 días me tendras de vuelta, ya se que no puedes vivir sin mí — bromee
— Pfff, pensé que te irías hoy — dijo poniendo su cara a mi altura

Pues claro, el rubio era un poco más alto que yo, era un par de años mas grande que yo, por ende yo era más pequeña ante el lider de la cabaña, al agacharse solo me hizo enojar era como si me estuviera llamando "Enana"

— No me mires así — dijo apartando su mirada — Tus ojos dan miedo a veces — dijo
— ¡Hey! — dije algo ofendida
— No me malinterpretes princesa, pero el cambio de color es algo raro — me relaje y el me señalo — Ojos Café, ¿hay otro color? —

Reí mis ojos solo cambiaban a tres colores y el lo sabía, Cafe, azul y verde, siendo el azul una tonalida "viva" o "eléctrica" y el verde con un tono "azulado" era usual que estos cambiaran segun mis emociones.

— En fin, solo acompañare a algunos hijos de la cabaña de atenea por algunas cosas, nada importante — dije restándole importancia
— Confío en que si pasa algo tu les salvaras los traceros y pondrás en alto a la cabaña de Hermes —
— ¿Confías en mí para ello? — lo miré curiosa
— Siempre Sheccid, siempre confiaré en ti — dijo dedicándome una sonrisa



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𝑳𝒂 𝑵𝒐 𝑹𝒆𝒄𝒍𝒂𝒎𝒂𝒅𝒂 ¹ | 𝐄 𝐃 𝐈 𝐓 𝐀 𝐍 𝐃 𝐎 |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora