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¿Abrazarme? — el joven Tesla miraba al rededor buscando una pista de quien podría ser la persona que le mandado la segunda carta pero sólo encontró a los miembros del Consejo estudiantil — Bueno, por su letra puedo deducir que es un hombre, y que no le guste que tire sus cartas. — Tesla saco de su casillero una libreta de tapa color vino y guardo la carta en ella para luego volver a guardarlo en el casillero —

Uno de los miembros del Consejo estudiantil miraba todo con una sonrisa muy poca visible, pues el ver que esta vez su carta no fue tirada a la basura le hizo tener un poco más de esperanza con el chico de ojos azules que tanto le fascinan

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Uno de los miembros del Consejo estudiantil miraba todo con una sonrisa muy poca visible, pues el ver que esta vez su carta no fue tirada a la basura le hizo tener un poco más de esperanza con el chico de ojos azules que tanto le fascinan.

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Cartas al chico Tesla Donde viven las historias. Descúbrelo ahora