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"¿Que sucedió?" Fue su único pensamiento después de despertar pareció como si hubiera dormido toda una vida, sus recuerdos empezaron a volver

—CUIDADO!— si... alguien había gritado, había una niña pequeña en aquel lugar estaba... estaba a punto de caer por aquel barranco

—Maldita sea!— ¿por que ayude? No lo sabia, su cuerpo se movió solo tiro a la pequeña hacia atrás demasiado rápido ni siquiera pudo mirar atrás suyo cuando aquel suelo había desaparecido

"Estaba cayendo" si había caído junto al borde de aquella tierra, su caída fue lenta y realmente no pensó en nada hasta ahora...

—no quiero!! maldicion aun no quiero morir! todavía... todavía no he hecho lo que deseaba hacer, MALDICION!!— la desesperación al entender que ese sería su fin la había consumido

Después de aquel último recuerdo, llegaron otros... toda su vida no entendía nada ¿por qué recordaría su vida de esa manera tan rara? Hasta que un dolor de cabeza

"mierda... duele mucho" su cabeza le dolía de una forma anormal "¿así que a esto se refería Layla con las jaquecas?" Pensó mientras intentaba entender que estaba sucediendo

—eh? Donde estoy? Esto no es un hospital...— dijo para si misma —espera... eso sonó muy cliché de un isekai, ahora faltaría que alguien entrara a la habitación diciendo joven señorita o alguna frase así para ser un comienzo de u— ni siquiera termino cuando sintió que alguien había entrado

—joven maestra, esta despierta! No se mueva voy a traer al médico inmediatamente— dijo un señor de tal vez mediana edad

"Me estás jodiendo ¿verdad?" Pensó para si misma

El tiempo pasó, aquel señor de mediana edad la miraba con preocupación mientras el médico la examinaba hasta que terminó y con una agradable sonrisa empezó a hablar

—joven maestra, al parecer esta en perfecto estado por suerte el golpe en la cabeza no fue más que un susto, pero igualmente tomé este remedio para evitar más inflamación— dijo para luego retirarse

—que alegría que no fuera nada, verdad joven maestra?— aquel hombre... por alguna razón lo encontraba demasiado familiar, pero su memoria no estaba ayudando mucho en aquel momento

—así es... igualmente deseo descansar más, aun duele un poco ya sabes— dijo la joven esperando que su forma de hablar no levantara muchas dudas, para su suerte no pasó nada aquel hombre solo salió

"Ahora mismo es importante saber en que historia estoy" pensó para sus adentros, pero no podía estar más feliz, después de todo había renacido como todas esas historias de isekais que había leído era simplemente genial! Una historia de fantasía, era simplemente increíble... además cuando uno muere después de tener su final feliz siempre vuelven a su mundo real ¿no? Con aquel pensamiento decidió vivir muy bien después de todo había nacido en una cuchara de oro

—ahora... cómo puedo saber que tipo de historia estoy? Maldición...por qué tuve que leer tantas historias?— ahora tenía un problema y grande... hasta que la respuesta llegó bastante rápido

—con su permiso, señorita Colette— había ingresado una criada... no una cualquier extra como se pensaría al principio si no la protagonista, ella era Erika! No podía haberse confundido de historia, pues Erika no era la típica protagonista... ella era más real, sus brazos, manos... hasta su mismo rostro mostraban cicatrices y a pesar de todo era hermosa, su hermoso cabello largo pelirrojo y aquellos ojos tenía heterocromia, una protagonista bastante inusual no podía negarlo... y gracias a ello pudo saber en que historia estaba

"Infierno de Erika"

La historia siempre giró en torno a Erika, una joven que ha sufrido abusos desde temprana edad. Ella llega con como esclava a la casa de Colette y está última no fue muy diferente a todos los demás, siempre la despreció y la humilló... aunque realmente Colette no es la verdadera villana... si no rosette la hermana gemela de Colette, mientras los abusos continuaban Erika conoce a los dos personajes más importantes en la historia, un valeroso caballero y un noble duque, quienes la rescatan de su angustia y le brindan consuelo. A medida que Erika comienza a sanar, descubre que su corazón se inclina hacia el encantador duque, quien, a pesar de su estatus social, la trata con ternura y respeto... y tienen su final feliz

Una historia feliz... la cuestión en esta historia es que había un secundario, su más amado mago un joven que también llega a enamorarse de Erika, pero este muere al tratar de protegerla... era solo un joven niño que murió en vano

"Si estoy en el infierno de Erika! Voy a hacer todo lo posible para que mi bebé no muera!" Pensó decidida

—y tú quién eres?— finalmente preguntó Colette, necesitaba información, no sabía en qué momento de la historia estaba y fingir demencia no era extraño en la nobleza

—llegue hoy, maestra... soy Erika— dijo con una voz temblorosa... en el libro Erika jamás tuvo a nadie hasta que llegó el protagonista, solo había sido una niña abusada por todo el mundo... un mundo asqueroso que simplemente la dañó

"Bueno por suerte aún no la he dañado como en el libro" pensó la protagonista no merecía nada de lo que le pasó... tal vez fue un gesto insignificante para la joven, pero para Erika fue algo que jamás esperó

Colette había acariciado con suavidad su cabeza, para luego sonreírle

—espero que nos llevemos bien desde ahora para adelante, Erika. ¿me puedes traer un té?— dijo con suavidad, ella no era una perra para seguir la historia como debería ser, solo quería salvar a su personaje secundario y igualmente Erika sería salvada, así que para que debería causarle dolor?

—si, lo traeré enseguida, señorita— dijo rápidamente Erika para salir lo antes posible, aunque Colette no lo notó, la joven tenía un pequeño sonrojo en su cara al salir de aquella habitación

¿Por accidente enamore a la protagonista? (Pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora