capítulo 2

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Ah, ha, ha, ha, stayin' alive, stayin' alive

Cerrando los ojos me movía de un lado para otro avanzando mientras disfrutaba de la música.

Lo que mi cerebro no se dio cuenta es que en las paredes se podía notar más de una sombra bailando.

A simple vista cinco sombras a lo mucho siguiendo a la zombi relajada bailando.

Con precaución una persona empezó acercar su mano a la maleta con cuidado de no alertar a su dueño.

Lamentablemente falló su agarre cuando la persona se dio la vuelta.

Pensando que sería su fin apunto de huir uno de sus compañeros le silbo mientras con su dedo señalaba el objetivo.

Suspirando con alivio, planeaban retirarse en silencio.

Ah, ha, ha, ha, ¡¡¡stayin' alive-Haaaaaa!!!

A todos casi se les salió el corazón por el grito de muerte de la persona con audífonos.

—¡¿Que hacéis en mi mansión?!

Sin contestar comenzaron a correr a un salón cerrando la puerta cuando entraron.

—¡Ratas habrá!

Arrastrando mis cosas golpee la puerta con fuerza.

—¿Estas aulas no tienen ventana?

Sonriendo con malicia y agachándome caminaba sin que se lograran oír mis pasos, cuando logré mi meta de estar debajo de la ventana.

Salté y tomando mi maletín como un mazo rompí la ventana en mil pedazos.

—¿Cómo han osado a...?

Mi voz decayó al ver niños y adolescentes acurrucados con sangre en la ropa abrazándose en modo de protección.

—¿...invadir mi mansión?

«¿Quiénes son todas estas personas?»

...

Jeong-Hun Yi, un estudiante de la preparatoria Chodeung Haggyo o mejor conocida como escuela.

Estudiante con bajas calificaciones, además de ser un tipo con poco atractivo y delgado, sin músculo, debajo del promedio. Su escuela conformada por cuatro pisos dividido en grados y secciones, como cualquier otra siempre hay bullies que no te dejan en paz.

Desde que comenzó la secundaria fue obligado a hacer la mascota del grupo K.O. , más bien conocidos por sus iniciales. Nadie de la escuela sabe su significado, pero son muy temidos por eso.

—Jeong, ¿Hiciste la tarea no? Dámela

—Pero Hyeon, la maestra dijo que era individual

El joven habló en voz baja con miedo, mientras el más grande pasaba su brazo por su cuello.

—Jeong, ¿No le harías eso a un amigo verdad?

Mostrando una mirada amenazadora y siniestra por parte del más grande, el más bajo solo asintió con la cabeza para entregarle su tarea.

—¿Ves? No es tan difícil

Retirándose a su asiento, Jeong solo pudo apretar sus puños de la impotencia que sentía, no era la primera vez que le pasaba esto, a veces desearía ser el protagonista de un webcómic, encontrar amigos y vivir aventuras inimaginables, suspirando con ilusión la profesora entró en el salón dando inicio a las clases.

—Hoy los menores vendrán por una visita, les pido que se comporten y muestren modales ya que ellos muy pronto estarán en sus lugares. ¿Entendido? —calmadamente explicó a los alumnos.

The writer has no pulseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora