El sentido de pertenencia es fundamental para el desarrollo. Para fluir y vibrar en calma, se requiere una conexión con el espacio, con las plantas, el cielo, los colores palpitantes del rededor. No existe paz y emoción más serena que cuando perteneces, cuando reflejas tu hogar y tu esencia en los lugares que habitas, los corazones que enlazas con tu alma. Desde lo más sencillo como un admirar un panorama deleitable, un magenta violeta de colores, y el verde