Capítulo XVI

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- ¡MIERDA! - Grite asustada, había tenido un extraño sueño, peleábamos con los neófitos que querían a Bella muerta y después casi me mataban y …Alice... ¿Dónde está Alice?, me levante lo más rápido que pude y estaba en la habitación de Alice pero no la veía por ningún lado...mis sentidos estaban disparados como cuando me convertí, corrí por toda la casa disparada por mi velocidad, no la controlaba de nuevo, estaba chocando con todo en la casa y llegue a la parte de debajo de la casa, salí disparada de las escaleras

– ¡CAMILLE! - Me grito Rosalie cuando me vio toda desesperada y de estar de un lado a otro destruyendo la casa, su mirada tenía sorpresa y preocupación

–Alice ¿dónde está Alice? ¡¡ALICE!!- Grite muy desesperada tratando de buscarla, tenía miedo, la necesitaba conmigo, necesitaba su tacto, su aroma, escuchar su voz, la necesito a ella

-¡¡ALICE!!- Seguí gritando, Emmett y Rosalie trataron de sostenerme, forcejeaba su agarre

-¡¡ALICE!!- Yo solo gritaba su nombre, desesperada, no podía encontrarla por ningún lado y menos lograba si quiera captar su aroma, no controlaba mis habilidades, es como si fuera una neófita de nuevo.

Agarre a Emmett de la camisa en un ágil movimiento lanzando a Rosalie por algún lugar de la casa, golpee a Emmett tan fuerte que salió por la ventana, quebrándola y quedando fuera de la casa, llego Carlisle tratando de sostenerme junto con Esme, lance a Carlisle igual que a Emmett y salió por la ventana chocando con un árbol, solo mire a Esme y me zafe de su agarre con fuerza no quería lastimarla a ella, ella me ha tratado de maravilla y me recuerda a mamá,no podía herirla salí de la casa

Emmett regreso y me agarro por la espalda y Rosalie  tomo mis manos inmovilizándolas mientras Carlisle me sostenía del cuerpo y Esme trataba de hablarme para mantener la calma

–Camille, tranquilízate, respira- Dijo Esme hablándome, no podía , necesitaba a Alice

- ¡¡ALICE!! Necesito a Alice- Grité con mucha desesperación, comenzaba a sentir que me hacía falta el aire y tenía una presión en el pecho, conocía esta sensación era un ataque de ansiedad, los sufría cuando aún era humana pensé que ya no me darían ahora de que soy un híbrido. Logre visualizar a los lobos, eran Leah, Skylar y Seth, el hermano de Leah, estaban en su forma de lobo podía escucharlos, estaban muy preocupados por mí, pero yo solo pensaba en Alice, logre en un ágil movimiento deshacerme de Emmett golpeando su cara con mi cabeza, use la fuerza que ejercía Rosalie en su contra agachándome, cayó al suelo, tome a Carlisle del cuerpo y lo estampe en el suelo con bastante fuerza, pude escuchar cómo se le rompía uno que otro hueso

- Cariño tienes que mantener la calma- Escuche decir a Esme de nuevo tomando su distancia de mi

– Alice- Dije con la voz quebrada, el aire cada vez era menos y comenzaba a marearme por la falta de aire, estaba perdiendo el equilibrio y caí al suelo

–La necesito- Dije entre cortada

– Camille- Pude escuchar una voz bien conocida, la mire y era ella, Elizabeth ¿Qué hacía aquí ?

- Ell- Dije a como pude y logre ver que corría hacia a mi soltando las bolsas que traía en la mano, venia con Edward y Bella.
Elizabeth me abrazo inmediatamente, también me hacía falta ella y logre calmarme un poco , pero aun necesitaba con urgencia a Alice

– Relájate, respira linda – Me dijo Ell, lo intentaba, pero el hecho de no tener a Alice cerca me estaba matando por dentro literalmente, yo para este momento ya estaba llorando desconsolada

– La necesito- Dije segura separándome del abrazo de Elizabeth, podía sentir la preocupación de todos, traté de caminar para adentrarme al bosque y disponerme a buscarla, pero solo pude ver como todo se me nublaba y veía el piso... me había desvanecido pero no sentí el golpe en el suelo, al contrario pude sentir ese aroma impregnar mis fosas nasales, ese tan especial aroma que hace que mi cuerpo reaccione y se relaje al instante, pude sentir como el aire por fin entraba a mis pulmones, como dejaba de templar y mi vista se estabilizaba... por fin era ella , era Alice.

Desde que te víDonde viven las historias. Descúbrelo ahora