La guerra cesó. Una victoria y un paz abunda. Sin embargo es momento de que el rey comience a conocerse mejor al lado de su leal guardaespaldas y amigo; Corvus.
En el proceso puede que haya nuevos sentimientos por descubrir.
...
ADVERTENCIA DE SPOILERS: Se hará mención a ciertos sucesos de las ultimas temporadas de la serie.
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— Sí, lo estoy.—
El joven se sintió herido en lo más profundo de su ser por la respuesta sincera que recibió, pero, a pesar de ello, su curiosidad por descubrir quién era la persona que había conquistado el corazón del guardia solo se intensificó. Su mente comenzó a vagar entre distintas posibilidades, imaginando que tal vez se trataba de su compañero de cabello rubio, quien solía dedicarle cálidas sonrisas al moreno, con el cual también compartía mucho de su tiempo. También pensó en la mujer de ojos azules que, en la sala del trono, lo miraba de manera coqueta y tentadora, dejando al joven sumido en una maraña de suposiciones y deseos de saber más.
— ¿Por qué la pregunta, majestad?...— Pregunto ante el silencio pesado del chico.— De cualquier modo, sé que no debería entrometerme de más en su vida pero, ¿Podría saber quién es esa persona?, tal vez pueda ayudarle y aconsejar de mejor forma si sé de quién se trata...
— Yo deseo que estés entrometido en mi vida, eres parte de ella y-...— Se detuvo abruptamente al darse cuenta de que su cuerpo había reaccionado antes que sus palabras. Fue en ese momento cuando notó que su mano descansaba sobre la del moreno, apretándola con fuerza, mientras su boca seguía hablando sin que él pudiera controlarlo. Un intenso calor se apoderó de su rostro, y agradeció en silencio la oscuridad que ocultaba el evidente sonrojo que se extendía por sus mejillas.
— No tienes que hablarme con formalidades...somos amigos después de todo...— Ante el silencio abrumador del hombre dio una ultima caricia a su mano y la soltó lentamente.— Solamente yo no estoy listo para enfrentar mis emociones...
El mayor también sentía el calor subir a su rostro, sorprendido tanto por la calidez y suavidad de las manos del menor como por la inesperada acción. Sin poder contenerse, tomó con delicadeza la mano del joven y, antes de que pudiera dudarlo, la acercó a sus labios, depositando un tierno beso lleno de cariño sobre ella. El gesto, tan inesperado como íntimo, dejó al menor completamente sin palabras, mientras un torbellino de emociones se desataba en su interior incapaz de poder ignorarlo por mucho tiempo.
— Muy bien, Ez...— Aclaro su voz.— No debes decírmelo ahora, puedes contarme sobre tus emociones, cuando te sientas listo lo contarás , te escucharé, te apoyaré y haré todo lo que esté en mi poder para serte de utilidad... Mientras tanto, sabes que estaré aquí para ti
— Corvus...— Se encontraba sumido en sus dudas, debatiéndose entre si debía confesar sus verdaderos sentimientos, si debía revelar la intensa atracción que sentía hacia el otro. Sus palabras agobiaban en su mente, habían palabras de amor luchando por salir, pero cuando estuvo a punto de expresar lo que realmente sentía, solo consiguió murmurar un simple...— Gracias...
