—. ¡Luzu! ¡Quackity llegó!—. Apenas estaba terminando de acomodar su pin cuando su madre le grito desde el piso de abajo.
Ya había desayunado, se había aseado, tomo su mochila y bajo, se sorprendió un poco al ver solo a Alexis esperándolo, no con Rubén como le había dicho.
—. Hola, Lusuuu—. Saludo como siempre lo hacía, un choque de manos y de puños.
Ambos se despidieron, salieron de la casa y empezaron a caminar hacía la escuela.
—. Pensé que Rabis también vendría—. Borja se encargó de romper el hielo, todavía confundido por no ver al de gorra de oso.
Hubo un silencio de unos segundos.
—. Rubiuh... ¡Se quedo dormido! Síp, esta bien dormido en la casa—. Asintió repetidas veces ante su propia respuesta.
Luzu lo miro unos segundos más, hasta que miro el piso y siguió así hasta que llegaron a la escuela.
Desde que empezó el año, todos se reunían afuera de esta para entrar juntos, aunque fueran a diferentes salones y grados.
Para Borja fue una sorpresa cuando vio a Rubius hablando con Vegetta, al parecer el oji morado regañaba al castaño por algo.
Ambos llegaron con su grupo de amigos, Quackity claramente nervioso al ser descubierto por su mentira y además de tener la constante mirada del oji rojizo sobre él.
—. ¿Por qué venís juntos?—. David, tan indiscreto como siempre, fue el que quiso sacar de duda a todos.
Alexis iba a hablar, pero Luzu se le adelantó.
—. Me dijo que Rubius y él vendrían por mi para caminar hasta aquí—. Contestó sin pelos en la lengua señalando al menor de todos.
Menor quien se quedo callado pensando en una excusa.
El timbre sonó.
Alexis corrió a su salón gritando un "Te veo en el salón, Lusuu".
Todos miraron confundidos a Borja. Quien solo les regreso la mirada en silencio, diciendo un "No se atrevan a decir nada" con los ojos.
Después cada quien se fue a su respectivo salón.
Cuando Luzu llegó al suyo, encontro a Quackity tratando de esconderse detrás de un libro.
El problema es que sostenía el libro al revés.
Se sentó en su lugar, que curiosamente estaba al lado del chico de parche de pato, así que pudo mirarlo el resto de las clases, esperando algo que dijera acerca de lo ocurrido esa mañana.
Pero no.
Quackity se la paso callado.