Es más divertido vivir entre LoCos Los creepypastas

3. ¿Quieres jugar?

Saludos a mis amigos benji, Yoss y Coni nun

-tres....dos....¡uno! ¡lista oh no ahí voy!-

Me aleje de la pared destapado mis ojos para empezar a buscar a la pequeña y adorable Sally. Está es la quinta ronda quedamos dos a dos, debo encontrarla sí quiero ganar. Abrí la puerta del cuarto, Sally me obligó a contar en aquel lugar que estaba lleno de escobas y productos de limpieza de seguro los usaban para limpiar la sangre de la casa. Es lo único que se me ocurrió para asegurarse de que no hiciera trampa. No sería capas de hacerlo, nunca me gusto ganar con trampas, ni que a mi me las hicieran.

Me dirigí hacía la sala busque detrás de los sillones y detrás de los cojines pero no encontré nada. Continúe por la cocina tampoco encontré nada eso era lo único donde podía buscar en el primer piso, dios, le dije a Sally que no podíamos jugar en los cuartos. Solo espero que no tenga que entrar a la de jeff o slender. Subí las escaleras y camine por el pasillo derecho encontrándome con una puerta de madera algo maltratada que tenía un cartel en medio de este con el nombre de Sally escrito con pintura de color rosa. Sería realmente ridícula que ella estuviera en su habitación escondida pero aún así tenía que comprobarlo pero lo único que encontré fueron barias muñecas debajo de la cama.

-al parecer Sally está decidida a ganar- di una risa leve que fue callada al instante cuando escuche rápidas pisadas por las escaleras que se dirigían hacia el piso de abajo. Me apresure para intentar de alcanzar a Sally, la visualice desde lejos cuando esta había llegado al cuarto donde teníamos que contar y saltaba y gritaba de felicidad al haber ganado. Verla así te producía ternura al instante, después de todo ella es una alegre niña.

-¡felicidades!- fui hacia ella y la abrase mientras ella reía.

-fue divertido, ¿Ahora a que jugamos?-

- wow veo que aun estas llena de energía pequeña. - coloque mi mano tocando mi barbilla mientras apoyaba un dedo en mi boca era un gesto que hacia cuando me ponía a pensar, después de unos segundos le respondí. -¿tienes algún juego de mesa?-

-¡claro que si! Ahora vuelvo- la pequeña subió las escaleras corriendo hacia su habitación.

Sonreí con ternura Sally era como la hermana que nunca tuve, es una niña tan dulce, no puedo creer que alguien le hizo daño.... Me senté en el sillón descansando un poco este era el octavo juego que jugamos ella es un fantasma pero yo sigo siendo humana y obviamente me canso mire el final y recordé como esta tarde Jeff me asusto y después como meto aquel al final de las escaleras. De hecho aun me dolía la espalda de aquella caída, Jeff es tan molesto..un segundo, ¿Donde quedo la camara? Me levante y comencé a buscar por todo el suelo buscando la cámara que no sólo tenía la escena donde por primera ves me pude desquitar con Jeff peor también tenía donde mostraba como gritaba como loca por su culpa.

Paso lo que más temía, no estaba la cámara y lo mas seguro es que alguien de la casa lo allá tomado si fue Jeff enloqueceré. Peor seria que Liu lo viera moriría de vergüenza o si Slendy lo ve de seguro hará que me quede mas tiempo encerrada, tal ves exagero pero no quiero pensar que pasara si lo ven todos.

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Eran las 9:00 de la noche en el bosque todo estaba totalmente obscuro, si intentaras caminar por ahí de seguro tropezaras con las raíces de los árboles que lo conforman aunque nadie se atrevería a entrar a aquel bosque que es la casa de un monstruo y sus tres leales proxys. Masky, Hoody y Toby quienes estaban vigilando muy bien la zona para matar a cualquiera que se atreviese a entrar. En la entrada se encontraba un cartel que alertaba que quien entrara se dirigía a su propia muerte. Aun así eso no servia de mucho varios idiotas lo ignoraban y estaban decididos a buscar las famosas notas de Slendeman como si se tratara de un juego.