Querida Leid:
Soy muy observadora.
Pero ni siquiera tú, que me miras continuamente, lo sabes.
Hoy me has pillado mirándote.
Me has sonreído.
Mi corazón se aceleró y mi pulso latía a mil.
No te respondí.
No puede hacer nada, lo siento.
-Abigäil.
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Leid .
Short StorySegunda parte de 'Abigäil'. "Te colaste en mi corazón. Me di cuenta demasiado tarde. Pero, quiera o no, tengo que aceptarlo."