Capítulo 6

1.3K 147 1
                                    

Zee acunó su rostro, sus ojos buscando los de Nunew. -No estoy seguro, Nunew. El primer momento en que te vi dormitando en la silla, yo supe que quería llegar a conocerte mejor. Lamento si sientes que voy demasiado fuerte, pero sé que podemos hacer que esto funcione. Por favor. Sólo danos una oportunidad.

-¿Darnos? -preguntó Nunew-. ¿Cómo puede haber un nosotros, si yo no soy gay? Estoy confundido como el infierno, Zee.

Zee suspiró, tirando de Nunew más cerca. -Lo sé, amor. Y lo siento. Yo soy la causa de tu confusión, pero no puedo evitar lo que siento.

Nunew se removió, con ganas de hacerle la pregunta a Zee que había estado invadiéndolo desde anoche.

-Sólo dilo, amor. Puedo decir que hay algo en tu mente. -Pasó la mano sobre la espalda de Nunew, creando pequeñas ondas de placer en todo el cuerpo.

Nunew se echó hacia atrás y se quedó mirando al hombre que se estaba convirtiendo en una parte importante de su vida. Él lo soltó antes de que perdiera el valor. -¿Yo soy gay ahora?

Los ojos de Zee se suavizaron, con una sonrisa tirando de su boca.-¿Es eso lo que te molesta?

-Bueno, sí. ¿Lo soy? - Nunew trató de agachar la cabeza, pero Zee la sostuvo en su lugar, por lo que Nunew lo miró.

-¿Te sientes atraído por los hombres?

-No, sólo por ti. -dijo la última parte más bajo, solo en caso de que pequeñas orejas estuvieran escuchando. Janis ya tenía suficiente munición para disparar contra él. No hacía falta que le llenara una maldita bazuca para ella.

-¿Y si fueras gay? ¿Sería eso tan malo? Estoy pensando en que tal vez es sólo por mí por quien te sientes atraído. En realidad estaba esperando que solo fuera por mí. -Zee lo besó suavemente, su mano subiendo para acunar la parte posterior de la cabeza de Nunew. Profundizó el beso, moliendo su erección contra el estómago de Nunew. 

Nunew estaba nervioso, pero sabía que eso era lo que quería. Él estaba cansado de luchar contra eso, cansado de cuestionarlo. Había decidido sólo seguir al conejo por el agujero y ver a dónde lo llevaba, y esperanzadoramente nadie gritaría a todo pulmón.

- Zee- Nunew susurró contra sus labios mientras trataba lo mejor posible de moverse cerca. Su erección palpitaba, su piel estaba sensible al tacto. Él quería a este hombre. ¿Cómo podía ser que pasara eso? Aun no estaba seguro. Todo lo que sabía era que necesitaba alivio.

-¿Sí, amor? - Zee había levantado a Nunew, sentándolo en el contador, mientras él mismo se situó entre las piernas de Nunew. Nunew era un hombre alto, pero el vicepresidente lo hacía sentir como uno de los siete enanos. Zee agarró el pene cubierto por el pantalón de Nunew y comenzó a apretarlo suavemente. Nunew gimió, su cabeza cayó hacia atrás en la alacena, apenas consciente del golpe.

-Cuidado, bebé. - Zee rio suavemente. Desabrochó el pantalón de Nunew mientras sus manos presionaban en el endurecido eje de Nunew. Nunew siseó y luego agarró la muñeca de Zeee.

- Janis-protestó en voz baja.

Zee asintió y luego dio un paso atrás, agarrando a Nunew por la cintura y lo bajó a sus pies. Zee tomó la mano de Nunew en la suya mientras se escabullían en su habitación. Zee cerró la puerta, luego deslizó una silla hacia esta y la empujó debajo de la manija. 

Nunew se rio mientras retorcía las manos delante de él. -¿No confías en la pequeña pícara?

-No, en absoluto. - Zee jaló el suéter de Nunew hacia arriba y fuera, colocando sus labios en uno de los pezones.

El Vicepresidente de NuNew - ZeeNuNewDonde viven las historias. Descúbrelo ahora