❀pop corn plus love {zico}

11: Chofer y (mal) cuidador.

Llego toda cargada por las compras, las pongo en el suelo y respiro. En estos momentos es cuando necesito a mi hermano. En la mañana, hice el aseo para más tarde hacer las compras y después salir. 

— ¡NamJoon! —lo llamo para que me ayude con las bolsas. No viene. Camino a su cuarto, pero algo llama mi atención en la mesa. Una nota. Seguido de un mensaje.

Veo la nota primero: "Poppy, tuve que irme antes al evento de la tarde. Cuando llegue te mando la dirección. De tu hermano que te ama, Joonie~". ¿Qué? Es un maldito.

El mensaje del celular, efectivamente, tiene la dirección. La busco en el mapa de mi celular y... maldición, es en un lugar lejos de casa, y muy muy peligroso. ¿Cómo esperaba NamJoon que fuera? Se supone que no se irían, ¿qué paso? ¿Dónde está la hermandad? Suspiro.

No podré ir. Por mi cabeza solo aparecen escenas de secuestros y violaciones, todo trágico, pero ¿qué otra cosa se puede pensar? Si eso es todo lo que pasan en la televisión.

Tomo bolsa por bolsa, para ir ordenándolas en las repisas y estantes. Si me quedaré algo útil tengo que hacer, aunque todo lo hice en la mañana.

Suena mi celular. Un mensaje.

NamJoonie: ¿Vendrás?

SoYeon: Si quieres que me secuestren, iré.

NamJoonie: ¿Entonces?

SoYeon: Claro que no. Te creía más inteligente, bro~

NamJoonie: Como quieras, te veo en la noche... o mañana.

Se nota la preocupación. Ese es el hermano que me gasto. Mejor duermo un rato. O veo una película. Mucho mejor.

Tarareo una canción mientras arreglo las cosas en el living. Reviso las películas que tengo, hoy veré una antigua... "Grease". Amo esa película.

Está todo listo y yo me arropo hasta el cuello con frazadas. Ricas, ricas frazadas.

~*~

Están cantando, cuando escucho la puerta.

Tatan, tatan... ¡¿Qué?! ¿La puerta?

Me arropo todavía más. Sí, arriba de la cabeza. Que gran mecanismo de defensa.

— ¿Gum? ¿So?

¿JiHo? Saco un poco de cobertor y miro.

—So, ¿qué haces? —me mira tierno.

—Me escondo. ¿Qué no es obvio?

—¿De quién? ¿De mí?

—Claro que no, nunca me escondería de ti —cierro los ojos y los abro.

—Que linda —me tiende la mano. —Ya, vámonos.

— ¿Dónde? ¿Adónde vamos?

—A mi competencia. ¿Dónde más? —tomo su mano y me paro.

Suena "You're the one that I want" en la televisión, yo solo sonrío pensando en la letra.

— ¿Cómo entraste? —pregunto.

—Por la puerta, esta vez —levanta su mano y me muestra las llaves. —Rap Monster me las paso, para que te viniera a buscar.

— ¿En serio?