"𝑹𝑬𝑽𝑬𝑳𝑳𝑰𝑶𝑵" 𝑵𝑶𝑹𝑬𝑵

ℭ𝔥𝔞𝔭𝔱𝔢𝔯 1

La puerta se abrió de golpe y Renjun dio un respingo en su cama. 

Eran las tres con cuatro.Renjun se giró de cara a la pared, metió su móvil bajo la almohada y fingió dormir en cuanto notó que los pasos de su compañero se arrastraban en su dirección. 

Sabía lo que venía.

Jeno se metió en su cama, le pasó un brazo sobre la cintura, juntó sus cuerpos y le rozó el cuello con sus labios, erizándole la piel.

Jeno se pegó más a su espalda.

—Bebé... —lo llamó con voz seductora.

Renjun apretó sus labios y cerró sus ojos con fuerza.

—Te necesito —Jeno ronroneó sobre su oído.Renjun reprimió un sollozo, pero no pudo evitar que una lágrima silenciosa bajara por su mejilla en cuanto abrió sus ojos. 

Ya no quería hacerlo

-Juniie-insistió Jeno.

Y Renjun se giró para encararlo.

Su aliento y su camisa olían a tabaco y a alcohol, pero aún siendo así, Renjun se acercó más y presionó sus labios sobre los alcoholizados de su compañero. Cerró sus ojos de nuevo y bloqueó todo lo demás. 

Sacó de su mente la realidad y se entregó al beso. que no por su sabor etílico dejaba de ser delicioso, porque en el fondo, estaba el sabor natural de Jeno, muy en el fondo sabia a el, al hombre que Renjun amaba en secreto.

Lentamente, Jeno fue despojando a Renjun de su ropa para cubrirle la piel con suaves mordidas y roces estremecedores creados con su habilidosa lengua. 

Renjun cerró los ojos con más fuerza y sus dedos se aferraron al cabello y a los hombros de Jeno. 

Deseaba poder resistirse a él, deseaba que sus atenciones no fueran tan placenteras y que no lo llevaran al borde con tanta facilidad, pero era una causa perdida. 

Los múltiples gemidos, que delataban su excitación, escaparon de su boca y se perdieron en la oscuridad.Jeno se desvistió a tirones con la ayuda de Renjun y las prendas fueron a parar sobre la pila de libros en el escritorio que dividia ambas camas. 

Unos cuantos lápices cayeron al suelo, perturbando el repentino silencio con su tintineo, pero no importó, porque en ese momento sus pieles desnudas se rozaban, sus rostros estaban a la misma altura y sus labios a nada de distancia.

Sus labios se encontraron y Renjun tembló, siempre temblaba cuando Jeno acariciaba sus labios, cuando se los mordía con suavidad, cuando se los lamía, cuando se los chupaba y cuando tiraba de ellos.

Jeno no tenia prisa, quería darle lo mejor de él, quería deleitarse con sus sabor, quería hacerlo suyo completamente y no solo vaciarse en él, Jeno queria que Renjun lo disfrutara, quería que Renjun lo amara. 

Ansiaba poder gritarle al mundo que el más bello estudiante de arquitectura era suyo y no de otro, quería contarle a todos que se habían entregado uno al otro incontables veces en ese dormitorio del campus.

Renjun lo miró a los ojos con tanto deseo que, aún en la oscuridad, Jeno pudo ver en esos ojos de cachorro el mismo brillo lujurioso que sus propios ojos reflejaban, por lo que siguió besando cada rincón de ese delgado cuerpo de proporciones perfectas, hasta que Renjun se convirtió en un desastre de gemidos que suplicaban porque su cuerpo fuera llenado.

Cuando Jeno finalmente lo llenó, Renjun no tardó en aferrarse a él con brazos y piernas. No pasó mucho tiempo para que de su boca escaparan balbuceos que suplicaban por <<Más>>

Jeno aprisionó uno de los brazos de Renjun contra el colchón y lo recorrió hasta alcanzar su mano. 

Entrelazó sus dedos; tener su mano así, entrelazada a la de Renjun, lo hacía sentir completo. 

Jeno empezó a susurrar confesiones al oído de Renjun, quien se apresuró a besarlo para obligarlo a callar; odiaba tanto sus palabras como las ansiaba.

¿Por qué no las decia frente a Jaehyun? 

¿Por qué Jeno no las decía a la luz del día? O mejor aún, ¿Por qué Jeno no las decía estando sobrio?

Renjun apretó sus ojos, conteniendo su frustración, y lo besó con tanta fuerza que le rasgó el labio inferior.

Idiota, eso no se hacía, nunca se dejaban marcas, no se dejaba evidencia de lo que ocurría a luces apagadas. 

No queria causarle problemas con su novia cuando esta viniera a buscarlo por la mañana.

Jeno se relamió la sangre del labio...

-Me gustó-confesó con voz rasposa y se lanzó sobre los labios de Renjun. 

Internó la lengua dentro de su boca, le tomó las caderas y lo embistió con fuerza. La cama golpeó la pared y su miembro golpeó la próstata de Renjun.

-Ahi-Renjun exclamó arqueando la espalda.

-Ahi?-Jeno preguntó, golpeando el mismo lugar.

-Si, ahi-Renjun confirmó-, Sigue, no te detengas.

Y Jeno no se detuvo: golpeó una y otra vez en el mismo lugar, sintiéndose poderoso por tener a su bello compañero cubierto de sudor, atrapado bajo su cuerpo, con la mirada desenfocada y en los labios una mueca de satisfacción. Era tan excitante que en poco tiempo ambos encontraron su climax.

Cuando sus cuerpos dejaron de temblar y sus respiraciones se regularon, Renjun se removió. 

Su amante lo comprendio, se separó de su cuerpo y salió de la cama.

No hubo más palabras. 

Renjun se arropó de nuevo y se giró hacia la pared para intentar dormir. 

Jeno arrastró sus pies hasta su propia cama y se metió bajo sus sábanas, acostándose de cara a la pared al igual que Renjun.





























𝗙𝗶𝗻 𝗱𝗲𝗹 𝗽𝗿𝗶𝗺𝗲𝗿 𝗰𝗮𝗽í𝘁𝘂𝗹𝗼 =𝟵, 𝗲𝘀𝗽𝗲𝗿𝗼 𝗹𝗲𝘀 𝗵𝗮𝘆𝗮 𝗴𝘂𝘀𝘁𝗮𝗻𝗱𝗼 (897 palabras)