La perfección del "Miau"

Karaoke 2/4

Luego de la tremenda rola que se echaron el michi con botas y el Shinigami, permanecieron callados mientras bebían y decían cualquier tipo de estupideces.

Kitty por su lado, aún seguía avergonzada que había empezado a beber sin darse cuenta de cuántos trago se había tomado ya, había perdido la cuenta total.

—Es que tú eres todo para mí María —canto algo torpe el lobo blanco, estando al lado de el felino español— Espera... ni conozco ninguna María.

—El alcohol —menciono el pequeño can, mirando algo preocupado a Gato.—

—Dos hombres un camino —canto a lo bajo Kitty, aunque de igual forma todos los que estaban a su lado la escucharon.—

—Por dios, ustedes no pueden beber si hacer algo tonto —el pequeño can miro a todos los que estaban a su lado— Creo que debí quedarme con Shrek...

—En definitiva mi querido colega —hablo Ricitos de una manera torpe— Pero como Gato y el Lobo ya se echaron tremendo karaoke es el turno de Patitas Suaves.

—¿Que yo que? —pregunto desconcertada Kitty.—

—Como oíste Patitas Suaves, échate una rola —exclamo Ricitos, levantando su vaso.—

A pesar de que las margaritas eran más suaves que el resto de alcohol, con Ricitos pareció ser todo lo contrario quién ya parecía mareada y pasada de unos cuantos tragos. Aunque claro, no eran margaritas lo que en realidad estaba bebiendo la rubia.

—No gracias...

—Para mi está mucho más que mejor —comento Perrito.—

—Che, para le quitas lo divertido a la vida —exclamo Bebé.—

—Hey calmados, ya se nos ocurría algo para pasar el ra-...

—Por aquel beso que te di —canto el gato español— En aquella calle oscura.

—Me estoy volviendo loco sin tí.
Siento un dolor que no le encuentro la cura —le siguió la letra el Shinigami.—

—Tu me dejaste una cicatriz.
Tu me dejaste un vacío en mí —el felino tarareó.—

—Solo me dejaste en un mundo gris —canto el lobo blanco— Regrésame el amor que algún día sentí.

—Oh que bien —exclamo Kitty con sarcasmo.—

—¿QUE? eL EmPEzO —señala a el Shinigami.—

—¿Eh? —exclamo la Muerte— No me culpes, el que empezo a cantar fuiste tú.

—Y tu que le sigues la corriente —le respondió Kitty.—

—Hey ya pues, cálmense de verdad —dijo Ricitos, tomándose su trago de tequila— Aunque siendo sincera, no está mal la cumbia que estaban cantando.

—¿Gracias? —dijeron tanto el felino y el lobo, al unísono.—

***

—La basta experiencia de haber tomado leche entera muchas veces —dijo Gato riendo como idiota— Es que sabes en qué estado puedes terminar...

—Si, puedes terminar bien pendejo —hablo la Muerte y siguió tomando su vodka.—

Dicho aquello, recibió un leve golpe en el hombro por el felino español.

—Creo que era mejor, en serio, no haber salido a beber —menciono Kitty, sujetando un vaso de leche en su mano.—

—Ya es tarde para el arrepentimiento...—hablo Ricitos— Aunque se me hace que te entro la depresión.

Y asi siguieron durante un buen rato, haciendo de todo lo que se le ocurría e incluso, comentando sus experiencias con la bebida, una que más sorprendió a todos o en su mayoría, fue saber que Ricitos desde hace mucho ya había tenido sus dos primeras borracheras.

Aunque claro, Muerte aclaro que el anduvo presente en ese entonces esperando ver si la rubia caía en algo y perdía la vida.

Pero para su desgracia, no sucedió.

—Oye...—llamo Gato a el Shinigami.—

—¿Que? —le respondió de manera torpe.—

—So —dijo el felino español soltando una carcajada.—

—....—nadie dijo nada, solo miraban a el gato anaranjado.—

—Idiota —exclamo el Shinigami, tomando un trago de vodka.—

***

—I can't believe we're finally alone
I can't believe I almost went home
What are the chances? Everyone's dancing
And he's not with you

—The universe must have divined this —canto Gato, para después tomar un trago de su vaso— What am I gonna do? Not grab your wrist?

—I could be a better boyfriend than him —el Shinigami cantó mirando a el felino con resentimiento— I could do the shit that he never did.
Up all night, I won't quit.

Y justo en ese momento, cuando Gato estuvo apunto de cantar, todo quedo en silencio al escuchar como un grupo de guardias armados entraron de golpe a el bar.

—¡Nos informaron que los ladrones; Kitty Patitas Suaves, Ricitos de Oro, Bebé y el forajido Gato con Botas estaban aquí! —hablo uno de los guardias, captando la atención de los mencionados— ¿¡Se encuentran aquí!?

Todos los presentes guardaron silencio, sin saber que decir o como actuar, claro, podían decir así de facil dónde estaban, pero tampoco querían tener una muerte temprana.

—¡Si, aquí están! —la voz de el Shinigami llamo la atención de aquellos guardias y todos los presentes, que voltearon a ver en dirección a la barra— ¿¡Y que pedo!?

—¿Y tú quién eres? —le pregunto uno de los guardias, con notable molestia.—

—Soy el repartidor de pizzas, ¿ordenaste una muerte segura? —le respondio de manera intimidante— Soy la Muerte...

—¿La Muerte? —alzo su ceja— Buen chiste, perro. Pero ya, ¿dónde estan los criminales?

—Ahmm M-muerte, es mejor irnos —le menciono Perrito, con nervios.—

—Oh claro que no Perrito, estos bastardos necesitan una lección —dijo sonriendo de manera escalofriante para todos.—

—Muerte, escucha a Perrito. Es mejor irnos...—hablo Kitty de manera torpe.—

—¡Vengan hijos de puta! —grito sacando sus hachas, corriendo con dirección hacia los guardias.—

—No se ustedes, pero yo no dejaré que lo haga el solo —comento Ricitos sujetando con fuerzas su bastón.—

Y así, fue como empezaron una pelea de vida o muerte, aunque claro, todos en el lugar se alboroto también.

—Pero que idiotas...

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Ando corta de ideas, asi que solo escribo puras babosadas :)

Espero que les haya gustado.

Adiós ❤️