𝗮𝗳𝗲𝗹𝗶𝗼

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Llegaron a la gran casa Choi, dónde estaban los pasillos largos y el lugar donde habitaban los cuatro hermanos.

Sin embargo, fueron directamente hacia el área exterior donde en el jardín trasero se encontraba aquel edificio blanco con su cúpula. Una parte de templo cambiante que parecía ser un espacio deliberadamente puesto ahí sin que encajara con todo lo demás.

Los cuatro jóvenes se encontraron. Junhui y Minghao enseguida se mantuvieron lado a lado; los hermanos adoptivos hicieron lo mismo.

Seungcheol ya había llegado y estaba vestido con un traje completamente negro y sin adornos, con una gabardina oscura que le daba aspecto de sacerdote, con todo y botas negras. Wonwoo bromeó que se parecía a Neo de Matrix y Mingyu agradeció el comentario para aliviar el ambiente, pero ninguno de los otros chicos rió.

El adulto abrió las puertas de hierro con el sol y la luna, para seguir el corto camino que llevaba a las puertas de madera para entrar al edificio.

Los jóvenes lo siguieron, esperando todo y a la vez nada.

Entraron, pisando el suelo de mármol blanco. La línea de ventanas que rodeaba el inicio de la cúpula como un anillo se encontraban abiertas, dejando entrar la luz natural y la brisa de afuera.

En medio estaba aquel aparato astronómico el cual Minghao le había dicho a Mingyu que era una especie de reloj, aunque tenía otras funciones. Su mecánica podía cambiar y los engranajes se acomodaban de acuerdo a la función que fuera a cumplir.

Por el momento sólo se mantenía con la representación de un sol y una luna, hechos de oro y plata respectivamente, con un fondo estelar y otros brazos de la estructura que parecían poder moverse.

Seungcheol caminó hasta el aparato, pero los jóvenes se detuvieron frente a él, viéndolo con ojos curiosos.

—Este es el Setsuna —Seungcheol lo presentó, extendiendo un brazo con la palma abierta hacia el objeto—. Es una reliquia, si tuviera que explicar cada función que tiene, me llevaría mucho tiempo, así que con cada una que utilicemos, la iré describiendo para ustedes. Por el momento sólo representará el inicio del eclipse.

Wonwoo, siempre curioso, se acercó un poco más para ver cada detalle. En el fondo estelar con cada constelación del cielo nocturno, vio destellos dorados y plateados alternados que parecían trazar órbitas que no podía atañer a nada que conociera.

—Y este es el Templo de la Luna y el Sol —dijo, extendiendo los brazos—. Aparece en forma material en este lugar, pero tiene residencia completa en la luna, dónde permanece latente en los años del ciclo que ya se cumplió, hasta cumplir el 500, donde vuelve a aparecer en la Tierra.

Los cuatro jóvenes lo escucharon con atención y Seungcheol continuó.

—Al igual que el Setsuna, es cambiante y se adecuará de acuerdo a nuestras necesidades. Aquí haremos los rituales a distintas horas del día de ahora en adelante, cuando el eclipse solar llegué y en ustedes se manifiesten las marcas de su nacimiento como las reencarnaciones de los Espíritus y sus Guardianes.

Tenía que explicar sin dar mucha información para evitar en los jóvenes una sobrecarga. Tenían muchas dudas, pero cada uno de ellos sabía que lo más prudente era esperar por las explicaciones de Seungcheol que simplemente preguntarlas todas de una vez.

Todo a su tiempo, parecía ser que la cronología sería su aliada, y al mismo tiempo, su mayor enemiga.

—El día de hoy el Setsuna marcará el Lichtgestalt, con el eclipse solar —Señaló a la figuras del sol y la luna—. El reloj con su cuenta regresiva de ciclos de 30 y 31 días hasta cumplir 12 de ellos.

Monat (WonHui/GyuHao)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora