Un silencio se mantuvo en el ambiente cuando Seungcheol terminó de narrar la leyenda que todos ellos conocían, usando las sombras reflejadas en el techo.
Sólo había un detalle que en los relatos típicos no solían comentar, y eso era lo del ciclo de 500 años, relacionado a la reencarnación de estos espíritus.
Generalmente la historia terminaba en que ambos humanos con los espíritus atrapados en sus cuerpos eran asesinados por los guardianes para proteger a la Tierra, y la leyenda quedaba en un final trágico para el amor de ellos, pero feliz para la continuación de la humanidad.
Sin embargo, Junhui y Minghao no parecían sorprendidos con el cambio de la historia. No había nada diferente en sus expresiones y se mantuvieron con los brazos cruzados y atentos en la narración, pero no hubo emociones de confusión que se pudieran notar en ellos.
—Espera, ¿por qué nos cuentas eso? Y lo del final, ¿acaso no acababa con el regreso de los espíritus al cielo?
Mingyu fue el primero en romper el silencio. La única fuente de iluminación seguía siendo esa llama y las sombras se movían sobre sus rostros.
El adulto miró a los cuatro jóvenes, alternando sus ojos oscuros entre cada uno de ellos.
Luego bajó la vista y negó con la cabeza.
—La verdadera historia es la que les acabo de contar.
—Es sólo una leyenda —dijo Wonwoo y notó de reojo que Junhui lo miró directamente de nuevo—. No tiene importancia si el final cambia. Es sólo un cuento. Un mito de Yabbay.
Una risita irónica y sin humor. Wonwoo y Mingyu buscaron su procedencia y Jun se cubrió la boca, negando también con su cabeza, como si las palabras del chico de gafas hubieran sido un chiste para él.
Minghao suspiró, con una mirada de reproche a Seungcheol.
—Por eso les debiste haber dicho desde que descubriste su identidad.
—¿Decirnos qué? —Mingyu preguntó exasperado.
Wonwoo tuvo un mal presentimiento, o al menos, sintió algo en su estómago y en su pecho que no pudo identificar.
Seungcheol se mantuvo serio, pero la manera en la que su ceño se fruncía tenía que ver con algo que lo conflictuaba por dentro.
—Decirles lo que son. Lo que representan. Su deber en la vida. Sus identidades verdaderas.
Ambos hermanos adoptivos se miraron mutuamente, confundidos y con cierta ansiedad al no comprender lo que sucedía.
—No les conté una "leyenda" —resaltó esa última palabra—. Les conté la verdadera historia de nuestro pueblo y lo que los humanos hicieron —Los ojos serios de Seungcheol se clavaron en sus hermanos menores con gravedad—. Les conté su historia.
Fue el turno de Wonwoo de lanzar una risa sin humor.
—Ya veo por donde va esto y no puede ser cierto —expresó, alzando las manos con incredulidad—. Debe ser una broma.
—Y eso que a ustedes ni siquiera les toca la peor parte —dijo Minghao por lo bajo, molesto, acercándose más al lado de Junhui que lo miró con cierta tristeza.
—Miren, fue mi error no decirles desde antes, pero ahora lo hago. Mañana es el eclipse y la marca que llevan desde su nacimiento se manifestará en ustedes. El tiempo empezará a correr. Hasta que llegue el Finsternis y no haya vuelta atrás.
Todo eso sonaba ajeno y sin sentido para los dos chicos que no entendían que sucedía o porque Seungcheol les decía aquello.
Pero antes de que pudieran expresar más dudas, el adulto alzó su mano y pidió silencio.
ESTÁS LEYENDO
Monat (WonHui/GyuHao)
Fiksi Penggemarexiste una vieja leyenda en el pueblo de yabbay, de que alguna vez los hombres se atrevieron a atrapar los espíritus sagrados de la luna y el sol en dos cuerpos humanos. la humanidad entera casi paga caro con esa osadía, pues los espíritus estuviero...