Culpable No culpable

Capítulo 1.

Siempre me he considerado una chica muy extrovertida, habladora, amistosa, alegre, familiar entre otras cualidades más. Mi vida totalmente normal como cualquier vida de alguna adolescente de 17 años, en realidad cumplí los 18 tres meses después de lo sucedido. Ojalá nunca los 18 me hubiesen llegado, porque fue lo peor que me paso

16 de octubre 2016.

-Marilyn Corning, ¿se declara usted culpable de haber asesinado a Karin Lanson con arma blanca, el 9 de octubre de este mismo año a las siete y 23 minutos de la noche en la propiedad de la víctima?- No quedaba de otra que declararme culpable de un crimen que yo obviamente no cometí, solo tenemos una semana mi familia y yo con este problema y yo literalmente siento que tengo toda una eternidad en esto, pero bueno, todos saben que yo no fui quien asesino a esa mujer, yo trabaje en su casa cuidando a su hijo menor, hasta que un día llegue y la encontré en el suelo desangrada, su cuerpo ya estaba frio porque tenía horas ahí, pero en realidad fue su esposo quien la mato. En el momento que llamé a la policía para decirles lo sucedido pude ver a su esposo salir por la puerta de atrás de la casa, pero bueno, mi familia es pobre así que nos toca perder contra personas con dinero y poder. El hombre obviamente justifico que fui yo, compro a los jueces y, bueno.

- Si, me declaro culpable.- Mi madre, padre y mi hermano quienes no creían que yo había matado a esa mujer en el momento en que yo me declare culpable ellos creyeron que realmente fui yo quien lo hizo, en realidad la familia de la mujer me amenazo de matar a toda mi familia así que no quedo de otra.

-Queda usted sentenciada a 30 años de cárcel por el asesinato de Karin Lanson- Todo termino, bueno, para todos ellos, para mi no. Mi familia se olvido de mi desde ese momento y, fui trasladada a una cárcel de menores hasta que cumpliera los 18, allí no me sentía tan incomoda, conocí personas, una chica, Irene, quien me ayudo a estabilizarme allí, quien luego de 2 semanas la liberaron porque cumplió su sentencia.

Ya pasaron los 3 meses así que cumplí los 18 años y me trasladaron a una cárcel para mayores, no era una sencilla cárcel como en la que estaba, esta era una cárcel de hombres y mujeres, todos juntos, la única diferencia era que en las habitaciones solo permitían compartirlas con mujeres, no mujeres y hombres, pero ya después el área del patio, comedor, baños etc. era compartido entre mujeres y hombres.

-Este es tu celda, chica. Es la numero 799 como puedes ver es celda compartida con 3 mujeres más, ahí al lado de tu cama hay un papel de los horarios de comida, baño y la hora de dormir.- Un guardia me llevo a lo que sería mi celda, aparte del uniforme color naranja que ya tenia puesto, me entrego otro más para mantenerme limpia.

-Sangre nueva, eh- Dice una mujer de algunos 30 años, tenia un lado de la cara rajada, Dios, que horror. Tenía la herida tapada con una gasa, pero era notable lo horrible que a de estar esa herida.

-No empieces Magdalena- Dice otra chica más joven, se veía de algunos 25 años.- Hola, mi nombre es Idalisa, ¿el tuyo es?-Pregunto la chica mientras me estrechaba la mano.

-Marilyn, Marilyn Corning.- Respondí mientras le daba la mano para saludar, la chica se ve agradable al igual que Magdalena, aunque aun no me inspiren confianza espero llevarme bien con ellas.

-Esta es mi cama y aquella es la de Magdalena, elige entre esas dos camas-señala dos comas que de lejos se ven en el mal estado que están.- Te recomiendo esta que esta aquí- Se sienta en una de las camas, es que en esa cama de allá mataron a una chica y se dice que su alma no descanso en paz y su espíritu sigue ahí.

-Idalisa, ¿te puedes callar?, no espantes a la pobre muchacha, ven mi amor, organiza tus cosas aquí- Magdalena me coloco sus manos en los hombros y me acompaño a la cama que eligió Idalisa, entre las dos me ayudaron a organizar lo poco que tenía, mi uniforme, papel de baño, entre otras cosas mas para mi mantenimiento personal. Mientras organizábamos me dieron la oportunidad de conocer un poco más de ellas las dos ya tienen bastante tiempo aquí, Idalisa tiene 5 años con una condena de 20 años por defalco de empresa y Magdalena tiene 9 años aquí y esta condenada a 30 años de cárcel al igual que yo, por haber matado a su marido quien abusaba de ella.