Las aventuras de Aome en la Era Feudal finalmente han llegado a su fin. Ella ha regresado a la Era Moderna decidida a seguir adelante con su vida, pero ha decidido que debe hacerlo en otro lugar. Necesitando un nuevo comienzo, Aome Higurashi viaja a...
Aome yacía sobre el cálido pecho de Emmett con sus brazos alrededor de ella mientras dormían completamente saciados después de toda una noche de hacer el amor. Los rayos del sol de la mañana brillaban a través de la ventana aterrizando en el rostro de Aome, haciéndola moverse. Intentó alejarse rodando, pero los brazos de Emmett la apretaron.
"¿A dónde vas?".
"Necesito darme la vuelta, el sol está en mis ojos".
Emmett aflojo su agarre, permitiendo que Aome rodara y se pusiera de lado. Luego se acurrucó detrás de ella y volvieron a dormirse un rato más. Era media mañana cuando Aome se despertó de nuevo con un ruido en el estómago. Emmett rió detrás de ella hasta que su estómago gruño en respuesta.
"Supongo que es hora de desayunar"dijo.
"Supongo que sí".
"¿Por qué nos damos una ducha y luego pedimos servicio a la habitación?".
"Eso suena perfecto".
Aome alcanzó su bata de seda que había sacado de su maleta la noche anterior y se la puso, luego se levantó de la cama, mientras que Emmett se levantó completamente desnudo y se dirigió al baño, Aome se sonrojo al ver a su esposo desnudo pero lo siguió de todos modos.
Emmett acababa de terminar de orinar cuando Aome entró al baño. Se lavó las manos y se cepilló los dientes. Luego fue a la ducha para encenderla, mientras Aome hacía sus necesidades. Cuando la temperatura fue la adecuada, Emmett se metió a la ducha, para entonces Aome se había lavado las manos y cepillado los dientes. Se quitó la bata y se unió a su esposo en la ducha.
Proceden a lavarse el cabello y explorar el cuerpo del otro. Eventualmente, Emmett recogió a Aome y le hizo el amor en la ducha. Salieron antes de que el agua se enfriara, una vez afuera se secaron y se vistieron. Emmett, vistiéndose rápidamente, fue a la sala y ordenó el desayuno mientras Aome se secaba el cabello. Unos minutos más tarde llegó un miembro del personal del servicio a las habitaciones con el desayuno.
"Bonjuor Monsieur, ¿dónde quiere que prepare su desayuno?".
"En la terraza, por favor, señorita".
La joven llevó la bandeja de comida a la terraza y comenzó a preparar el desayuno cuando terminó, le sonrió a Emmett y él le dió una generosa propina.
"Buen provecho, señor".
"Gracias".
En ese momento, Aome salió del baño. Vio a Emmett parado en la terraza mirando la ciudad.
Ella se coloco detrás de él y envolvió sus brazos alrededor de su cintura. Se volteo en sus brazos, se inclinó y la besó.
"El desayuno está aquí, bebé".
"Genial, me muero de hambre".
Emmett guió a Aome hacia la mesa donde servida una hermosa comida, consistía en baguettes, croissants, mermelada, café con leche y jugo de naranja.
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