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Cierto pelinegro ingresa al salón en donde solo hay algunos estudiantes porque todavía no son horas de clases, el pelinegro toma del brazo a un pelicastaño y lo arrastra hacia los últimos asientos

—auch, sueltame— se queja el pelicastaño cuando a la fuerza tuvo que sentarse en ese lugar

—es que te tengo que contar algo muy interesante— le dice el pelinegro

—soy el presidente de la clase, sabes que debería estar sentado adelante por si pasa algo— el pelinegro rueda los ojos

—ya deja de hablar— dice colocando su índice sobre los labios del castaño y este se calla —ayer pasó algo— el castaño se gira en dirección de su amigo, apoya su cabeza en su mano izquierda

—te escucho—

—ayer esperé hasta que salgamos y me fuí a los baños, quedé en encontrarme con Lucas—

—¿el chico que siempre te sigue?— pregunta el castaño interrumpiendo a su amigo

—ese mismo, ayer por la mañana había querido tener sexo conmigo—

—¡¿en los baños?!— dice exaltado el castaño provocando que los estudiantes que estaban en el salón lo miren por un breve instante

—no miren chismosos— les dice el pelinegro mirando a sus compañeros —y tú Jimin, no grites, habla más bajo— lo regaña

—esta bien, es que eso me impactó— dice en voz baja

—como te decía, me propuso eso y como me estabas esperando en el salón le dije que para la salida y él aceptó, en la salida me fuí a los baños y ahí estaba—

—un momento Jungkook, pero tú no eres gay—

—¿cómo puedo saber que no si no he probado?— Jimin hace una mueca de asco —la cosa es que estábamos ahí, nos tocamos y todo, pero cuando me bajé los— Jimin coloca sus manos tapando el rostro de su mejor amigo

—mejor deja de contarme, sabes que me imagino todo lo que me dicen— Jimin niega varias veces con la cabeza y Jungkook quita las manos de Jimin

—con tus pequeñas manos no vas a poder evitar que te cuente que antes de que sigamos cuando me vio ahí abajo se asustó y se fue—

—¿qué?....— se calla por un momento y después... —jajajajajajjjja— casi cae al suelo y se tuvo que callar porque sus compañeros lo miraban —ni que la...— Jimin se levanta y le hace una reverencia a la profesora que había ingresado a dar clases

—saben sus libros en la página 68— dice la maestra y comienza a escribir fórmulas en la pizarra

—ni que la tuvieras tan grande— le dice en una voz más baja

—¿qué?, la tengo grande, ¿quieres ver?— dice Jungkook y Jimin solo sonríe con sorna —no podrías soportar—

—¿yo?— se señala a sí mismo Jimin aún con sorna en su sonrisa

—silencio por favor— dice la maestra al escuchar murmullos

—sí, seguro que lloras, vas a ver—

—no tengo miedo— levanta los hombros Jimin

—entonces vamos— sin que Jimin pueda hacer algo lo arrastra hacia los baños

—¿qué estás haciendo?— dice Jimin intentando librarse del agarre, pero Jungkook es más fuerte y logra llegar al baño cerrando la puerta por detrás de Jimin

Jungkook empuja a Jimin hacia la pared y antes de que Jimin pueda quedarse otra vez es callado por los labios de Jungkook, labios que se mueven de forma desesperada sobre los suyos haciendo que le sea difícil el poder seguir el ritmo porque nunca antes había besado

Jungkook introduce su lengua en la boca de Jimin haciendo que se escuche un gemido proveniente del castaño y su mano ejerce más presión en la cintura de Jimin, después esa mano va bajando hacia el trasero de Jimin y ahí es cuando recién el castaño reacciona y empuja con todas sus fuerzas al pelinegro para lograr separarse

—estúpido Jungkook— dice tocando sus labios, Jungkook iba a volver a acercarse pero Jimin lo detuvo —estamos en los baños, alguien puede venir a vernos, soy el presidente de la clase y esto no le haría bien a mi reputación— Jimin se da vuelta y se mira en el espejo viendo su desarreglado aspecto, en ese mismo espejo puede ver a Jungkook con el ceño fruncido

—¿no que no tenías miedo?, creo que le tienes miedo a mi pe—

—no seas tonto— Jimin se da vuelta otra vez cuando ya se acomodo la ropa y su cabello —aquí no, es más, para que no pienses que soy un cobarde propón un lugar para hacerlo sin que nos descubran, ten por seguro que te demostraré que no puedes ganarme—

—entonces hoy en mi casa, vamos a ver si puedes conmigo— extiende su mano Jungkook y Jimin hace lo mismo

—veremos quién le gana a quién— Jimin abre la puerta del baño y vuelven juntos al salón sentándose en su mismo lugar mientras la profesora sigue de espaldas escribiendo en la pizarra


































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LA INSPIRACIÓN PARA ESTA HISTORIA FUE TAN INSOLITA... CADA VEZ QUE LO RECUERDO ME DA RISA

¿SE PUEDE SENTIR ESTO POR UN AMIGO?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora