9 Estrellas- Litiago Y Trap

Sentir duele.

Tiago caminaba junto a los chicos que conoció hace unos momentos, estaba inseguro de si llevarlos o no, había parecido una buena idea hace unos minutos pero al verlos caminar y moverse entre las personas pensó que talvez sería muy difícil excusarse.
Son como niños es como si no conocieran lo más prioritario del ser humano como el peligro al cruzar la calle o la empatía al hablar.

La vida de Tiago no era la gran cosa, su madre murió hace un par de años, asique solo vive con su padre y hermano mayor. Su padre trato de salir adelante y nunca les faltó nada pero otro suceso los golpearía, su hermano tenía cáncer y estaba siendo difícil para el poder con todo.
Su papá era un hombre muy divertido siempre trataba de sacar una sonrisa de todos e incluso en los peores momentos, cuando su mamá murió, el y Cristian de verdad la sintieron pero su padre se encargó de que la ausencia de ella no se notará tanto.

A veces ayudaba a su padre trayendo dinero a casa por algunos trabajos que hacía en un local.
De acuerdo su casa no era muy gránde, si tenía una habitación para el y otra para su hermano, asique vería como acomodar a esos chicos que conoció. Su padre es un hombre bueno y seguro estaría feliz.

Tiago se detuvo frente a su casa y pensó que lo que haría sería realmente arriesgado, nunca habían extraños y menos, locos que se creían estrellas, pero había visto un poco de poder asique los ayudaría hasta donde pudiera. Por lo menos hasta descubrir que diablos estaba pasando y porque lo llamaban luz.

— Que estamos mirando? — dice fmk.

— Porque nos detuvimos? — lit mira a la luz.

— Es mi casa... — suspira el menor aún no muy convencido—  Vamos ...—cruzaron la calle y entro haciendo que todos entren también, miró a su alrededor — ya llegué!

— Tiago Uriel! No vas a volver a trabajar si vas a llegar tan tarde pendejo de... — su padre había estado preocupado por el, tanto que lo espero para la cena y no llegaba — Hola?

— Papá ellos son... Son chicos perdidos no tienen hogar.

— Hola señor.

— Hola señor papá de la luz.

— Un gusto conocer al hombre que ayudo a procrear a la luz.

Su papá los miró divertido y los saludó, para luego tomar del hombro a su hijo y alejarlo un poco. 

— Titi necesitas que llame a algún hospital?...

— No están locos Kuni... Solo perdidos... — se quita su campera y mochila — mira me caí y me iba a pisar un colectivo y ellos me ayudaron! 

— Te caiste? Sos torpe o que?

— Sin querer lo empujamos señor — dice Rusher un poco avergonzado ya que había Sido culpa suya y de Paulo.

— Pero ya lo cure no tiene rasguño — sonríe María acercándose y tomando el brazo.

— Ellos dicen la verdad...

— Bueno bueno, luego hablamos de esto... Supongo que tienen hambre? — los mira el mayor.

— No, digo algunos comimos penes..

El Kun casi se atraganta con su saliva —  Que?!

— Se refiere a panchos! Jajaja ah qué graciosos son — Tiago los mira preocupado, que haría si ellos no saben eso? Si definitivamente son muy raros. — si van a comer...

— Bueno siéntense donde puedan... También hay cuatro sillas en la mesa, Traeré comida.

— Papá iré a ver a mi hermano.
Mira a todos para que se queden allí, viendo que Lit tuvo la intención de seguirlo.— Ya vengo tranquilo...