⸻let's have some fun, this beat it's sick.
i want to take a ride on your disco stick
background cover by larryinlove
cover por mi.
(emiliano "dibu" martinez x male!oc)
(16.12.22 -???)
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#10: buen día lovegame by malfhoe
Lo abrazó con fuerzas cuando lo vio y una sonrisa había aparecido en su rostro al escuchar el apodo salir de los labios del mayor, los dos completa y fielmente felices por encontrarse en aquel lugar después de estar separados por un tiempo, por más que fuera corto.
Felipe Judas era una persona fácil y, a su vez, complicada de describir para su hermano menor; la razón era simple, porque era la persona a la que siempre había recurrido en todos sus años vivos, no podía recordar alguna vez en la que no lo había tenido a su lado. Salvo cuando peleaban, lo cuál había sucedido mucho cuando eran pequeños pero muy poco ahora que ambos eran adultos.
Benjamin nunca había visto feliz al mayor como lo había visto al conocer a la mujer que en ese instante era su esposa, era algo que hacía que su rostro se iluminara con solo la mención de ésta misma. Sin embargo, por más que intentara ocultarlo, él lo conocía a la perfección; algo estaba haciendo que la cabeza del mayor de los hermanos estuviera maquinando, lo notaba desde el instante en el que se separó de su abrazo y vio que el brillo de sus ojos ya se había desvanecido un poco, además de que las ojeras bajo sus ojos se notaban más que nunca.
—¿Qué pasó? ¿No dormís bien sin tu esposa? —se burló el castaño, sentándose en la mesa que habían pedido para desayunar juntos.
Su intención estaba clara, la mirada de advertencia que le dedicó Felipe le decía que las cosas se encontraban un poco complicadas.
—Mejor no hablemos de eso —respondió el azabache, alzando el menú para leerlo. Benjamin alzó una ceja al escuchar su respuesta.
—¿Y eso?
—Benito…
—Da… habla, sino no te pago el desayuno —le amenazó encogiéndose entre sus hombros, como si estuviera dejándole sin opción.
El mayor de los Judas soltó un suspiro de cansancio, pasándose las manos por el rostro y arreglándose los rulos que habían caído por su frente. Hasta ese entonces, su hermano menor no había notado la forma descuidada en la que se encontraba. Su barba un poco más marcada que hacía unas semanas y su cabello más largo, su camisa arrugada y estaba seguro que la almohada se encontraba marcada en su cachete.
Estaba seguro que si la madre de ambos lo veía, no dudaría en cuestionarlo en una manera mucho peor en la que él lo estaba haciendo. Porque si algo era seguro era que Benito era el hijo de su madre, era chismoso y no aceptaba que los demás no confiaran en su persona con temas que él podía ayudar.
